Inauguran Semana de Cine Alemán en La Habana
5 de julio de 2018
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Gracias al Instituto Goethe y la embajada de la República Federal de Alemania, presentar una semana de cine alemán contemporáneo en La Habana, ha devenido una tradición para nuestros cinéfilos. Transcurrió mucho más de un decenio desde que el Festival Internacional de Cine de La Habana la incluyó en su programación y esta que abarca del miércoles 4 al domingo 8 en la sala capitalina Charles Chaplin es la décimo cuarta edición que programan junto a la Cinemateca de Cuba. Ya es reiterativo señalar la pluralidad temáticas, estilística, genérica que imprimen singularidad a una cinematografía que no vacila en remontarse al pasado para hablar de conflictos del convulso presente. Este año adquiere particular significación por organizarse medio siglo después que en aquel resonante 1968 cuando Alexander Kluge filmara Los artistas bajo la carpa del circo: perplejos y Jean-Marie Straub su Crónica de Anna Magdalena Bach, mientras que la cooperativa de cineastas de Hamburgo, incluyendo a Wim Wenders, boicoteaba el Festival de Oberhausen en demanda de un espacio para sus cortometrajes en 16 mm.
En la selección de siete largometrajes conformada para esta ocasión descuella por su solidez la trilogía En plena Alemania: NSU, realizada por Christian Schwochow, Züli Aladag y Florian Cossen. Ellos se aproximan desde distintas aristas –Los victimarios, Las víctimas y Los investigadores– al surgimiento de un grupo neonazi autor de deleznables crímenes en los primeros siete años del siglo XXI. Visionar este violento tríptico confirma la frase premonitoria de Bertolt Brecht al referirse al renacimiento del germen del nazismo: «El monstruo que esto parió es aún fecundo». Frente a ese fidedigno reflejo de una realidad ante la cual no pueden permanecer de espaldas, el resto de los filmes programados adquiere distintos tonos con el fin de explorar dilemas personales (Bulevar Schönfeld), generacionales (¡Muerte a los hippies! ¡Que viva el Punk!), artísticos (Casting) o entre los sentimientos (El camino soñado).
Como corresponde a la Cinemateca de Cuba, institución que coauspicia la muestra visibilizar el patrimonio fílmico nacional, cada función incluye una edición del Noticiero ICAIC Latinoamericano, dirigido por Santiago Álvarez, el único en su tipo inscrito en el programa «Memoria del mundo» de la UNESCO. Posibilita rememorar a unos y revelar a otros, acontecimientos nacionales e internacionales ocurridos entre septiembre y octubre de 1963, en especial los daños causados en Cuba por el devastador ciclón Flora. También se incluye el documental Yo soy Malú, realizado por Mayra Álvarez Díaz, con producción germana en torno a nuestra medallista de los Juegos Paralímpicos de Rio de Janeiro 2016.
Recibamos con el interés renovado por cada nuevo contacto con el cine alemán, ahora novísimo, en la segunda década del siglo XXI esta muestra ilustrativa de su vasta producción en los últimos cuatro años.
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