Entrevista a Diana Cano, bailarina y actriz

4 de julio de 2014

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Marilyn Garbey

¿Qué presentarás en el Festival de las Artes?
El martes 25 la Facultad de Arte Danzario tendrá su noche en la sala Hubert de Blanck  y voy a presentar dos coreografías. La primera es un dúo, Supongamos,  y la otra es Seguir viviendo, que la bailo yo. Las dos coreografías la hemos ido trabajando a lo largo del curso. Seguir viviendo es el resultado de un ejercicio de la clase de Composición coreográfica, me interesó seguir trabajando el tema y pedí colaboración a un pianista, que interpreta la música en vivo. Eso forma parte del espíritu del Festival de las Artes, reunificar a estudiantes de todas la Facultades para que colaboremos unos con otros, primero como amigos y luego como artistas, construyendo nuestras creaciones. Ha sido muy bueno el trabajo con el pianista porque cada uno ha hecho sus aportes, él ha visto la propuesta de movimiento y lo ha trasladado a su lenguaje musical.

¿Cómo fue el proceso creativo con el dúo de bailarines?
Para Supongamos tomé la idea de la obra Nuestra señora de las nubes, una obra de Arístides Vargas, y es nuestro homenaje a uno de los grandes filmes de la cinematografía cubana que es Clandestinos, de Fernando Pérez. Queremos que el público sepa  que los jóvenes artistas no solo hablamos  de nuestra realidad inmediata, sino que también miramos a la Cuba de antes que naciéramos, a nuestra Historia. Trabajé con Caterine y Reydisnier, dos bailarines a los que conocí en la Escuela de Nivel Medio y que ahora mismo, al igual que yo, están en un momento muy importante de sus carreras, probando diferentes maneras de hacer. Ahora nos estamos conociendo de manera más profunda, le propongo ideas e imágenes porque casi siempre trabajo inspirada en textos teatrales. Es mi forma de coreografiar, me pregunto cómo puedo apropiarme de un texto para recrearlo como danza, lo que no puedo decir con palabras mi cuerpo se ocupa de decirlo, y viceversa.

¿Cuáles son las novedades que trae el Festival Marcapasos para los estudiantes?
En esta edición del Festival Marcapasos tendremos la posibilidad de presentarnos en el circuito de la calle Línea, y también habrá otras presentaciones de la gente de teatro. Será muy bueno asistir a los Talleres que van a impartir coreógrafos como Sandra Ramy y Luvién Mederos, se trabajará todo el día y en la noche se presentará al público el resultado. Eso será muy interesante para nosotros, porque casi siempre nos tomamos mucho tiempo para hacer una coreografía y ahora, después de trabajar durante un día, va a salir algo que verá el público. Otros maestros de la danza cubana, como Domingo Pau, Ramona de Saá y Laura Alonso, impartirán clases magistrales.

¿Por qué el teatro es motivo de inspiración?
Soy graduada del nivel medio de teatro. Ahora mismo estoy a la búsqueda de mi estilo propio, cercano a la danza-teatro. El teatro tiene mucha fuerza cuando se piensa por qué se hace, y creo que cuando los bailarines no tienen conocimientos dramatúrgicos o no saben cómo lograr la expresividad, o no saben trabajar sus emociones durante la representación,  pierden muchas ideas si no hay un coreógrafo que tengan esas herramientas para sacarle todo eso. Entonces el resultado no será tan bueno como cuando sabes que fuera de la escena hay alguien que, de cierta manera, me manipula para sacarme todo lo que puedo dar. Uso el texto porque propone acciones, el teatro es acción, el teatro no divaga, las acciones conducen al movimiento. A mí me gusta que el público entienda lo que quiero decirle. Cuando leo el texto descubro imágenes y sentimientos que quiero lleguen al público a través del movimiento, sin que tenga que decírselo con palabras, lo puedo decir con un gesto, con la respiración, con el rostro. Son recursos que tienen los bailarines y que, a veces, por falta de conocimientos, no los utiliza. Para mí ha sido importante porque he logrado hacer parte de mí a la danza contemporánea, de una manera productiva desde mi punto de vista como actriz.

¿Qué significa para ustedes presentarse en el circuito profesional de la calle Línea?
Para mí es un reto y es un compromiso de presentar un trabajo de buena calidad, como lo que se presenta allí habitualmente. Ha sido un estímulo al trabajo para que el nombre de la Facultad quede bien alto. Creo que esbueno que salgamos de Cubanacán y que esos actores y bailarines a los que vamos a ver cada fin de semana vengan, esta vez,  a vernos a nosotros. La idea es que haya un diálogo entre la nueva generación y los profesionales, que se vea lo que se está produciendo en la Ciudad de las Artes.

La danza moderna cubana celebra 55 años de trabajo. ¿Cómo puede influir el ISA como academia en el movimiento profesional?
Creo que puede influir mucho desde el punto de vista teórico, aquí recibimos mucha información que nos ayuda a lograr otras cosas que no se logran solo en el tabloncillo. Hay que hacer muchas lecturas, hay indagar en la Historia de la danza, y eso te evita cometer muchos errores por desconocimiento. El ISA puede aportar artistas con preparación teórica y práctica