Elementos teóricos en torno a la sostenibilidad

11 de noviembre de 2016

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Martha Oneida Pérez Cortés

 

 

Sostenibilidad es un término que surgió asociado al medio ambiente, pero en la actualidad su aplicación es diversa. Su empleo abarca otras áreas de la vida social como la política, el desarrollo, la economía, la cultura, lo social, la educación y hasta las relaciones humanas. De ahí, que se leen o escuchan expresiones como sostenibilidad planetaria, sostenibilidad financiera, sostenibilidad económica y sostenibilidad social.

El Doctor en Ciencias Laredo González Méndez en el artículo “La sostenibilidad interna de la empresa”, aclara que sostenibilidad es una palabra internacionalmente conocida como desarrollo sostenible o perdurable, surgida asociada al medio ambiente. Aclara que se encuentra en el documento conocido como Informe Brundtland de 1987, fruto de los trabajos de la Comisión de Medio Ambiente y Desarrollo de Naciones Unidas, creada en la Asamblea de las Naciones Unidas en 1983. Continúa planteando que dicha definición fue asumida en el Principio No. 3 de la Declaración de Río (1992) como “aquel desarrollo que satisface las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las generaciones futuras para atender sus propias necesidades. Puntualiza que el desarrollo sostenible tiene, al menos, un vector ambiental, uno económico y uno social.

A partir de este momento, el uso del término desarrollo sostenible implicó un cambio importante, en cuanto a la idea de sustentabilidad, utilizada con anterioridad, principalmente por su énfasis en lo ecológico. La ampliación del enfoque que se produce incluye ahora dimensiones del orden de los contextos económicos y sociales.

Otro elemento característico en torno al enfoque de la sostenibilidad es que se emplean indistintamente sostenibilidad o sustentabilidad. Ello se debe a que el término inglés sustainability se traduce de cualquiera de las dos formas mencionadas.

El sociólogo René Coulomb plantea que el calificativo sustentable remite a una característica de la acción humana cuando esta es capaz de incorporar, de “internalizar” los costos que de ella se derivan a nivel económico-financiero, medioambiental, social, político o cultural, y agrega que el concepto de sostenibilidad tiende a ser usado cada vez más para designar una acción que se sostiene en forma duradera a lo largo del tiempo. Ello hace ver que aunque se utiliza indistintamente, presenta sus diferencias. A su vez, puede considerarse que una acción humana es sostenible porque es sustentable.

A partir de estas consideraciones es, que según Coulomb, se dice que el carácter sustentable del desarrollo económico es lo que condiciona la sostenibilidad del mismo en el tiempo. Establece el vínculo con la concepción del desarrollo, al considerar el desarrollo sustentable y el desarrollo sostenido como facetas de esta concepción. Coulomb considera que la visión integral del desarrollo interrelaciona los componentes del desarrollo sustentable que son la economía, el ambiente y el bienestar social.