Edificio de Paseo del Prado No. 55 esquina a Cárcel

10 de junio de 2019

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Zenaida Iglesias Sánchez

Antiguo hotel Packard y otras dependencias.
Hoy: hotel Packard.

 

 

En el verano del 2018 abrió sus puertas el hotel de lujo Packard, si bien su ubicación es privilegiada dentro de la ciudad, aquí existió el edificio que lo acogió con la misma denominación hace muchos años atrás.

La historia se remonta al siglo XIX, cuando el coronel de ingenieros Manuel Pastor adquirió estos terrenos pertenecientes a la Real Hacienda en 1826. Durante varios años tuvo a su cargo la construcción de una casa en Prado y Cárcel. A mediados del siglo XIX vendió sus propiedades al señor Ignacio Rodríguez y este a Federico Quintana, quien reconstruyó luego de un incendio que causó graves estragos en esas construcciones. A finales del propio siglo XIX existían allí varios establecimientos comerciales. En 1895 compró estas propiedades el señor Luis Ulloa, radicándose en la esquina de Prado.

 

Entrado el siglo XX, Ulloa reedificó ganado altura los edificios que poseía, comenzó a alquilar habitaciones y fue extendiendo sus propiedades a través de la manzana. La casa de huéspedes mejoró su confort, se le introdujo elevador y a partir de 1912 se convirtió en hotel Biscuit, con la entrada principal por Prado. Al año siguiente inauguró el taller para autos Casa Ulloa y Compañía, contaba con un salón de exposición para los autos de la marca Packard entre otros. Con el paso del tiempo, otras dependencias se instalaron en esta dirección, por ejemplo, la radio-emisora RHC Cadena Azul y los noticiarios de cine de Manuel Alonso, también hacia la calle Prado.

 

 

En la década de 1930 se transformaron nuevamente estas propiedades conformadas por cuatro inmuebles, en manos de los hijos herederos de Ulloa. De tal forma, con Juan Ulloa el hotel reabrió sus puertas con el nombre de Packard en 1931, contaba con 72 habitaciones. Continuaban los locales ocupados por la cadena de radio y noticiario. Ese mismo año se inauguró en el local esquinero del hotel La Tasca Española, la primera de su tipo en Cuba, propiedad de don Pedro Tuñón.

 

En la segunda mitad del siglo XX la familia Ulloa permanecía en el inmueble, que estaba ocupado por distintas instituciones, como por ejemplo, el Ministerio del Transporte, el Ministerio de Bienestar Social, después la Corporación Nacional de Turismo y la Oficina del Carnaval habanero. Hasta la década del 1970 el hotel prestó servicio de hospedaje, pero había descendido su categoría.

 

Los trabajadores de la Unión de Empresas Constructoras del Caribe (UNECA) se instalaron en el inmueble en los años 1980 para repararlo; esto no se logró y devino poco después en casa de vecindad, encontrándose en estado crítico en la década de 1990.

 

 

En el año 2000 comenzaron los trabajos de vaciado y demolición interior, conservándose fragmentos de la antigua fachada. Varios proyectos se ejecutaron en años venideros, para quedar inaugurado el pasado año 2018.