Edificio de la calle Empedrado No. 107-109

21 de octubre de 2016

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Zenaida Iglesias Sánchez

Antes Garaje de Alfredo Pena y Hermanos.
Hoy: Edificio de garaje.

 

 

El edificio de la calle Empedrado No. 107-109 fue construido en el año 1954, pero sus antecedentes se remontan a la ocupación temprana de la parcela, muy próxima a los terrenos de la plaza de la Catedral. Se conoce que en 1871 aquí se encontraba levantada una casa colonial de dos plantas y cubierta de tejas. En 1919 fue demolida y en su lugar quedaba solamente el terreno. Al año siguiente su propietaria, la señora María Luisa Orduña, mandó a construir en este espacio, previo permiso de la Alcaldía Municipal, un edificio destinado a almacén de azúcar.

 

En 1940 la parcela de terreno se encontraba nuevamente desocupada, existiendo en medio del terreno una nave. Por entonces fue vendida al señor Alfredo Pena y Porto, quien cambió el curso de la historia llegando con este al edificio que se conserva hasta nuestros días.
De este modo, dicho propietario en febrero de 1954 se dirigió por escrito a las autoridades del ayuntamiento, solicitando la correspondiente licencia para realizar las nuevas obras y levantar el edificio de tres plantas de altura para Estación de Servicios y Garaje, de mampostería con techo de placa. El proyecto recayó en manos del Director Facultativo José Sabí Carreras y en la memoria descriptiva del mismo dejaba constancia de que se demolería lo allí existente y se realizarían las excavaciones pertinentes para lograr una cimentación adecuada, con el acabado de pisos y cubiertas de la mejor calidad y las instalaciones eléctricas y sanitarias cumpliendo con las Ordenanzas de Construcción vigentes.

 

Los trabajos comenzaron sin dilatación y finalizaron en octubre del citado año. De este modo quedó construido el edificio de la calle Empedrado No. 107-109, con la sobriedad y solidez que lo caracteriza. Luego del triunfo revolucionario del año ’59 y las leyes de nacionalización llevadas a cabo por el gobierno, el edificio pasó a propiedad del estado cubano. Evidentemente, tomando en cuenta sus características continuó desempeñando la misma función de carácter civil.

 

Ha mantenido su apariencia desde entonces, con dos plantas de altura y estilo ecléctico, código formal que imperó en las primeras décadas del pasado siglo XX. En la década del ’90 comenzó a explotarlo como garaje la División de Transporte de la Compañía “Fénix S.A.” de la Oficina del Historiador. En planta baja se instaló una dependencia gastronómica destinada a restaurante que retomó el nombre “Don Giovanni”, perteneciente a la Compañía Turística “Habaguanex S.A.” que hace pocos años cerró sus puertas, quedando el edificio por el frente libre y destinado solamente a garaje.