Desarrollo de la actividad de arrendamiento

21 de junio de 2013

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Martha Oneida Pérez Cortés

El arrendamiento de habitaciones para hospedaje ha tenido una evolución peculiar en Cuba debido a las diferentes etapas en el tratamiento de la propiedad después de 1959. Es una de las actividades económicas presentes desde el propio surgimiento de la villa de San Cristóbal de La Habana, cuando el desarrollo económico vinculado a la Bahía de La Habana, exigió de servicios para todo tipo de viajeros especialmente el alojamiento.
A continuación ofreceremos algunos aspectos que caracterizan la actividad económica privada en los territorios bajo la jurisdicción de la Oficina del Historiador para planificar, gestionar y controlar el desarrollo y los impactos de la misma en las zonas priorizadas para la conservación.
Los resultados que a continuación se ofrecen se obtuvieron a partir de entrevistas realizadas a 26 arrendatarios seleccionados al azar, durante el año 2010. Por ello los resultados indicativos y no representativos de la población total objeto de estudio.
En cuanto a la cantidad de habitaciones que arriendan, se obtuvo que más de la mitad de los arrendatarios declaran el alquiler de una habitación, mientras sólo el 38% declara dos habitaciones, cifra que podría ser superior, pues algunos entrevistados confesaron declarar oficialmente sólo una habitación y tener realmente dos disponibles.
Los precios de una habitación oscilan mayoritariamente entre 25 y 30 CUC. Un entrevistado refiere ajustar el precio si incluye desayuno (de 30 a 35 CUC). La mayoría entrega comisión de 5 CUC a los que le llevan turistas y refiere haber tenido que hacer ajustes de precios después del suceso del 11 de septiembre, momento en que el turismo mermó.

Las 26 casas visitadas contaban en total con 37 habitaciones, de las cuales el 62% tenía una cama matrimonial y una personal, el  97% aire acondicionado y el 73% baño privado, condiciones importantes para garantizar su confort.

Sólo el 4% de las habitaciones contaban con televisor, refiriendo los arrendatarios que podían hacer uso del de la casa. Los espacios de la casa más comúnmente ofrecidos para el uso de los turistas son la sala (65%), el comedor (50%), el patio (27%), los balcones (23%) y la cocina (19%).
El servicio de desayuno es ofrecido por el 88% de los entrevistados, lo que permite inferir que es muy demandado por los turistas, a diferencia de las cenas, que sólo representan el 42% de la muestra de estudio. Ello se explica si valoramos que los turistas que visitan las ciudades intentan aprovechar al máximo las horas del día en sus paseos y suelen demandar el régimen de consumo “alojamiento y desayuno”.
Los precios de los desayunos oscilan desde 1-5CUC, predominando entre 3-5 CUC. Los precios de la lavandería también son variables aunque predominan las tarifas de 3-5CUC según el tamaño de la bolsa. Los menos, dan el servicio por lo que desee pagar el huésped. Hay quien establece precios a las piezas, como por ejemplo pantalón a 40 centavos y medias a 0.5 centavos. Los precios de las cenas oscilan entre 8 y 10 CUC. Las casas que no poseen parqueo propio, negocian los mismos en casas u hoteles cercanos, donde generalmente cobran 2 CUC por noche.

La totalidad de los entrevistados declaran que al menos una persona dedica las 24 horas del día a la actividad. Aunque la mayoría refiere que en la temporada baja, al tener menos clientela dedican menos tiempo.
Algunos comentarios: El día completo, 24 horas; porque se levanta a las 6, va al mercado, tiene que limpiar, ver que no hay nada que arreglar, etc, Todo el tiempo, porque hay que estar pendiente; muchos turistas vienen de madrugada, y aunque tengan llaves, hay que esperarles por si meten a alguien en la casa. Es un trabajo esclavo y No sale nunca de su casa; está todo el tiempo; da máxima atención.

 
Bibliografía

Cruz Sosa, Niurka; Pérez Cortés, Martha Oneida y Herrero Peleteiro Iria Garazi. El arrendamiento privado en el Centro Histórico de La Habana. Investigación preliminar.