Depósito de Automóviles

13 de junio de 2014

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Zenaida Iglesias Sánchez

 

Calle de los Oficios No.13 esquina a Justiz.
Antes: Almacén.

La restauración del Centro Histórico en la década del ’80 del pasado siglo XX centró su objetivo principal en la recuperación de los ejes viales que enlazaban los principales espacios públicos, tal es el caso de la calle de los Oficios, donde se recuperaron diversos inmuebles de importante valor patrimonial por su antigüedad e historia. De este modo se llevó a efecto la  apertura de diferentes instalaciones museísticas, destacándose por su peculiaridad el museo de autos antiguos, como lo llaman algunos, o lo que realmente es, el “Depósito de automóviles”.

Afirman los entendidos en el tema, que la idea de coleccionar automóviles surge desde el comienzo mismo de la historia de estos, llegando a ser para algunos una pasión inigualable, es por esto que en el mundo hay gran número de variadas colecciones que abarcan y muestran todos los estilos, épocas y usos.

Los museos de automóviles generalmente son temáticos, aunque los hay más abarcadores. En nuestro caso, la colección que se exhibe es una recopilación de automóviles que en su mayoría han estado relacionados de una u otra forma con nuestra historia, de ahí que se exponen, autos de presidentes, artistas famosos y mártires de la revolución, siendo estos los de mayor atracción para el público visitante, entre otros de notoria antigüedad y atractivo, como el carro de bomberos que funcionó a principios del siglo XX, el carro funerario, motocicletas y hasta semáforos antiguos, mezclándose de manera ingenua diferentes épocas y estilos.

Por la forma en que se hallan dispuestos en el local que ocupan, un antiguo edificio destinado a comercio y almacén desde la época colonial, el local se denomina “Depósito de Automóviles”, pero no cabe duda de la importancia histórica del material que recoge la muestra y la singularidad del local, que le aporta un encanto peculiar y lo hace diferente.
El vehículo más antiguo de esta colección data de 1905 y el más moderno de 1989; son fundamentalmente de construcción norteamericana, aunque existen ejemplares fabricados en Italia, España, Alemania y el Reino Unido de Gran Bretaña. Las piezas de esta colección también se hacen notables por su importancia tecnológica y su valor en la historia universal del automóvil.