Criterios para emitir dictámenes
21 de octubre de 2016
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El Plan Maestro de la Oficina del Historiador se basa en el estricto cumplimiento de las Regulaciones Urbanísticas para autorizar cualquier tipo de intervención constructiva en la Zona Priorizada para la Conservación (ZPC), ya sea obra nueva o de conservación.
Entonces, según criterios generales extraídos del importante instrumento de la planificación, una comisión de especialistas de la entidad entre los que se encuentran arquitectos, ingenieros y abogados, evalúa cada solicitud. En primer lugar observa el sector urbano donde se ubica la parcela del edificio en que se intervendrá, pues “no es lo mismo construir en una plaza histórica o una calle comercial, por ejemplo, que en una zona eminentemente habitacional”.
También se analiza la tipología del edificio, lo que condiciona el uso posible: “los edificios que surgieron con una vocación residencial deben por regla general mantener esa actividad. Otros que acogieron funciones de carácter civil o industriales son más flexibles y admiten mejor un cambio de uso”. Igualmente, el Grado de protección (GP) es indispensable a la hora de otorgar un uso a un inmueble: “un edificio clasificado con GP 1 debe preservarse íntegramente, incluso restaurarse, mientras que uno con GP 4 admite mayores intervenciones”. Y por último los especialistas atienden la ubicación del local dentro del edificio ya que los locales de esquina y las plantas bajas de las calles comerciales tenían como regla general un uso público y una imagen particular, que interesa preservar y/o recuperar”.
Si usted desea conocer características de los más de 4 000 edificios de la ZPC que el Plan Maestro atesora en su Sistema de Información Territorial (SIT), puede acceder al link: http://www.sit.ohc.cu.
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