Copa Confederaciones: primer recuento

30 de agosto de 2013

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Miguel Ernesto Gómez Masjuán

La Copa Confederaciones es uno de los torneos más importantes que organiza la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol  (FIFA). Desde su edición inaugural, en 1992, hasta la más reciente, celebrada en Brasil, en 2013, cinco selecciones nacionales han levantado el trofeo de este evento.
En la Copa participan representantes de las seis Confederaciones de fútbol: los triunfadores de la Copa Asiática, Copa Africana, Copa Oro, Copa América, Copa de las Naciones de Oceanía, Eurocopa, así como el campeón del último Mundial, junto al país organizador.
La primera edición se celebró en 1992, por idea del monarca saudita Fahd quien estaba frustrado porque, hasta ese momento, la selección de su país no había participado en ninguna versión de la Copa del Mundo. Así surgió la “Copa del Rey Fahd”, disputada en Arabia Saudita, a la que asistieron solo cuatro países: Argentina, Estados Unidos, Costa de Marfil y Arabia Saudita.
La gran favorita de todos, Argentina, dirigida por Alfio “Coco” Basile,  no tuvo contratiempos para derrotar a los otros tres rivales. En la final, los sudamericanos, que tenían en sus filas a Gabriel Omar Batistuta, Diego Simeone, Oscar Ruggeri y Fernando Redondo, enfrentaron a Arabia Saudita. Ni siquiera el sofocante calor y el apoyo de 75 mil fanáticos fue suficiente para detener a los gauchos, quienes triunfaron tres goles por uno y se convirtieron en los primeros campeones.
Las siguientes dos ediciones de la “Copa del Rey Fahd” también tuvieron lugar en Arabia Saudita. En 1995, Argentina volvió a ser considerada favorita, aunque todos esperaban una gran oposición por parte de Dinamarca que era el campeón de Europa en ese momento. No hubo sorpresas, por lo que daneses y argentinos chocaron en el duelo por el título. Ante más de 30 mil espectadores, los europeos levantaron la Copa, tras ganar dos goles por cero.
Dos años más tarde, en 1997, la “Copa del Rey Fahd” pasó a ser un certamen oficial de la FIFA, por lo que cambió su nombre al que tiene en la actualidad: “Copa Confederaciones”. El reconocimiento influyó en la ampliación del número de participantes, hasta ocho y la organización de una fase de grupos, luego una semifinal y final. Nuevamente Arabia Saudita acogió al evento que fue ganado fácilmente por Brasil.
Los brasileños, dirigidos por Mario “Lobo” Zagallo, tenían una excelente dúo goleador, conformada por Romario y Ronaldo; además, en la alineación resaltaban jugadores como  Cafú, Roberto Carlos, Denilson y Juninho.
La final se disputó el 27 de diciembre y el rival de Brasil fue la sorprendente Australia que dejó en el camino a Uruguay. Aquel fue un desafío desnivelado que concluyó seis por cero, con 3 goles de Romario y otro de Ronaldo.
La Copa Confederaciones se había convertido en un torneo interesante, que atraía a los fanáticos, por lo que la FIFA implementó varias modificaciones. El primer cambio fue mover al evento de la que había sido la sede habitual: Arabia Saudita.
En 1999, México acogió al certamen y, ante su público, la selección Tricolor mostró su mejor fútbol. El equipo estaba dirigido por Manuel Lapuente y tenía en sus filas a futbolistas que hicieron historia en el fútbol de ese país, como Jorge Campos, Rafael Márquez, Cuauhtémoc Blanco  y Pavel Pardo.
Los mexicanos enfrentaron a Estados Unidos en una de las semifinales y en los 90 minutos de juego no hubo goles. Entonces fue necesario acudir a la prórroga, donde apareció Blanco, con un gol salvador, en el minuto 97, que colocó a los locales en la gran final, frente a Brasil, que había vencido en el otro partido a Arabia Saudita, por ocho goles a dos.
Todo el mundo consideró a la Canarinha como el gran favorito; pero los mexicanos se crecieron. En la primera media hora de juego, los goles de Zepeda y Abundis colocaron delante dos a cero a México; sin embargo, antes del descanso, Brasil empató, con anotaciones de Serginho y Ronaldinho, de penalti.
En la segunda parte, la selección Tricolor tomó nuevamente ventaja, cuatro a dos, por tantos de Zepeda y Cuauhtémoc; no obstante, Brasil no se rindió y un gol de Zé Roberto acortó la distancia y mantuvo la tensión en el Estadio Azteca hasta el pitazo final. Este puede considerarse el triunfo más importante, a nivel de selecciones de mayores, que ha obtenido México en su historia.
Entre 1992 y 1999 no hubo un claro dominador en la Copa Confederaciones, pues los títulos quedaron en manos de Argentina, Dinamarca, Brasil y México. ¿Se mantendría esta paridad en el siglo XXI?