Casa de Ignacio No. 504 esquina a Santa Clara II
5 de julio de 2013
|En una inscripción de 1882 del Registro de la Propiedad, no se expresan las medidas de la casa, pero es muy probable que ya tuviera las dimensiones y características con que ha llegado al presente.
En 1883 una mitad de casa fue hipotecada a favor de don Eusebio Abascal y Herrera, y debido a ello se le otorgó a dicho señor la escritura como propietario de la misma por título de venta judicial. Este tipo de negocio era muy frecuente en la época, ya que sus dueños vivían de sus rentas y raramente llegaban a residir en ellos. Por igual razón, no se conoce si el señor Abascal habitaba o no la casa, pero sí que utilizaba algunas de sus instalaciones como oficinas de la compañía Ruiz, Abascal y Ca., ya que en la Lista de Suscriptores a la Compañía Eléctrica de Cuba aparece bajo esta dirección con el número de suscripción 369.
En 1889 falleció el propietario de la otra mitad de la casa, don Francisco Alonso y Zequeira, heredando la propiedad su esposa y sus hijos, quienes adquirieron por partes iguales esta porción de casa, que nunca habitaron, y meses más tarde de forma voluntaria la hipotecaron a favor de don Evaristo Cabrera y Menéndez, que sí residía en ella.
Hacia 1889, la vivienda fue hipotecada nuevamente y un año después fue vendida, en 8 200 pesos oro del cuño español, a don Juan Ruiz y Cobo. Entre los términos de este contrato de compraventa se planteaba que la venta, real y perpetua, comprendía mitad de arrimos y demás acciones y anexidades, incluyéndose también la pluma de agua de que disfruta la casa por la que se abonan al Escelentismo ayuntamiento veinte pesos de canon anual.
Por las guías telefónicas se sabe que, desde 1904 y hasta 1911, trabajaba en esta casa Manuel Sobrino, un comerciante al que tal vez se debe la puerta metálica enrollable con que cuenta el inmueble en fachada; en 1905 radicaban en ella los Agentes de Aduana Emilio Portilla y Comp., y en 1906 los comisionistas A. Revesado y Ca.
Sin conocer bajo qué condiciones y fecha adquirieron el inmueble, por el archivo de Amillaramiento se sabe que sus propietarios desde 1921 y hasta 1960, fueron María de los Santos o de los Ángeles Fayetta y Henry A. Ruiz. Estos señores, que tampoco habitaban el inmueble, lo arrendaban en su totalidad, y a su vez la casa era sub-arrendada para viviendas y establecimientos -en 1935, por ejemplo, en la planta baja existía un local destinado al comercio de la firma Marí y Pinillas, y en los altos quince cuartos. La última arrendataria de que se tiene noticia fue la señora María Nieves Álvarez Rey, desde enero de 1953 hasta mayo de 1959. Luego de un inventario, en junio de 1960, el edificio fue clasificado como casa de inquilinato con cuatro espacios dedicados a vivienda y tres al comercio en planta baja, once habitaciones en el nivel superior y cinco en la azotea, prácticamente todos los cuartos habitados por las mismas personas durante más de quince años. Con el cierre de los comercios estos espacios fueron utilizados también como viviendas, y en la actualidad San Ignacio 504 es una ciudadela, cuyo estado constructivo es pésimo.
*Los datos históricos fueron tomados del estudio sobre la calle San Ignacio realizado por la Lic. Patricia Andino Díaz, Tesis de Grado, 2007, Facultad de Artes y Letras de la Universidad de La Habana.
Galería de Imágenes
Comentarios