Apostando por la alegría de vivir
29 de agosto de 2014
|Hemos estado durante varias semanas comentando acerca de un flagelo que nos puede arrebatar la alegría de vivir, el alcoholismo, que al igual que cualquier otra adicción puede empequeñecernos la vida hasta límites insospechados. Existen ilimitadas causas que pueden terminar o no hacer funcional la alegría de vivir, ella es determinante en el día a día.
Estamos en la era de los trasplantes, de los grandes avances en la medicina nuclear, pero también andamos por los tiempos del empleo de la llamada medicina alternativa, dentro de la cual se incluye la terapia floral, la energía piramidal, la acupuntura oriental, y tantas otras opciones que llenaríamos esta página dedicada al crecimiento personal.
Es una época, en la que el poder de la tecnología en el campo de la medicina, hace posible intervenciones jamás soñadas para curar a los humanos, pero muchas veces, olvidamos, como diría nuestro José Martí, a la verdadera medicina, la que precave, y no la que cura.
El estado de ánimo de las personas, determina, no solo en el agravamiento de una enfermedad, sino también en la aparición de estas. Podemos tener una pre disposición biológica u orgánica a determinada enfermedad, y quizás su detonante, no solo para su aparición, sino para su agravamiento si ya existiera, está determinado en gran medida por el estado de ánimo, por el humor, o por lo que hoy llaman las Ciencias de la Salud, y las Ciencias Sociales, Vulnerabilidad Psicosocial.
¿Qué es la Vulnerabilidad Psicosocial?
Algunos autores la conceptúan como la condición que modula la probabilidad de sufrir enfermedades, accidentes o lesiones auto infligidas, en virtud de las condiciones macro sociales especiales, tales como cataclismos, coyunturas socioeconómicas y demográficas, o guerras que afectan a masas de población, lo cual se puede manifestar en la totalidad de una región, o en una parte de las mismas que comparte condiciones, y modos de vida comunes; condiciones de grupo específicas, tales como la pertenencia a grupos marginales, determinadas sectas etc.; y también las condiciones individuales, y del sistema de relaciones de cada persona, con los demás, y dentro de su medio especifico.
Vulnerabilidad Psicosocial, es la posibilidad que tiene un individuo de enfermar, y en ocasiones, de mostrar una reacción emocional con repercusión en lo psíquico y en lo biológico, sea de forma consciente (necesidad sentida, o hecho necesidad por el sujeto) o inconsciente (necesidad no sentida o no percibida), lo cual puede manifestar verbalmente o no, o a través de alteraciones psico somáticas reales, todo dentro de un contexto auto personal, interpersonal, micro y macro social, y determinado por aspectos de su personalidad, su pertenencia a determinado grupo y contexto psico social, y bajo la influencia de condiciones ambientales.
El nicho ecológico de un organismo, es el medio en que vive y desarrolla todas sus funciones vitales. Las diferentes especies poseen una capacidad de adaptación ante los cambios del medio ambiente, que les permite sobrevivir en condiciones adversas, por lo que las variaciones que se puedan presentar en este, pueden producir un impacto, directa e indirectamente en los procesos biológicos, que pueden ser, reajustables cuando existen las potencialidades genéticas y orgánicas para darle respuesta al cambio.
En el caso de los humanos, el medio se hizo más diverso, por las necesarias relaciones sociales que estableció para producir, distribuir, y consumir sus medios de subsistencia; incorporando al medio natural, al medio social, sobre el cual actúa conscientemente.
Las condiciones de vida resultan para el género humano, lo que es para los animales el nicho ecológico. Los procesos de relación, organismo ambiente, intercambian de una manera sistemática, y su desbalance puede producir un impacto, como en cualquier otra especie animal, a los procesos biológicos, en sentido positivo potenciando la salud, y en dirección negativa, favoreciendo la aparición de la enfermedad.
El deterioro del proceso salud enfermedad, no solo se genera en el cuerpo, sino que más bien tiene sus raíces en las condiciones del entorno, los modos de organización social y productiva en que el hombre y la mujer se desempeña, lo que pudiera entenderse en términos ecológicos como las condiciones de vida determinantes del proceso salud – enfermedad, por todo ello, la interacción de los factores biológicos con su entorno, constituyen un complejo entramado de relaciones, que determina dentro de ese estado de salud que se caracteriza por ese estado de bienestar físico y mental, que independientemente de la presencia o no de una enfermedad es el que caracteriza en realidad el tener o no tener salud.
El hombre y la mujer son seres bio psico social, y se desarrollan tanto fisiológicas, como psicológica y socialmente dentro de determinado sistema de relaciones sociales, y dentro de determinado contexto o escenario social. A diferencia del animal que nace con una conducta biológica pre determinada, nacerá con un numero de reflejos incondicionados, a partir de los cuales, y a través de la herencia socio cultural como mediadora, desarrollará los reflejos condicionados, que estructurarán, entre otros componentes de la vida, su comportamiento futuro, y por ello, sus condiciones, estilo y organización de vida.
Este tema, lo continuaremos la próxima semana cuando nos acerquemos a los valores del humor en la salud. De momento, al menos, hemos aprendido que la alegría de vivir, constituye, sin lugar a dudas, un elemento importante dentro del proceso salud – enfermedad, de ahí la importancia de asumir la vida, con sus problemas y conflictos con una mirada más optimista y más resolutiva que quejosa.
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