Animales longevos, nos ganan en vejez

31 de marzo de 2017

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Josefina Cao López

 

 

Longevidad es un concepto que está inmerso en los estudios demográficos, estos abarcan a las poblaciones humanas y también las animales. Longevidad, se utiliza frecuentemente, cuando se hace referencia a la ancianidad o a la edad de un ser vivo, por ejemplo la longevidad de un árbol o de un animal. El tema ha sido y es objeto de preocupación científica, es motivo de interés y estudio, por ejemplo, en la agricultura se necesita conocer la longevidad de determinados animales y vegetales, a fin de valorar sus efectos en la producción y mejoramiento de las especies, y también ha sido abordado por la literatura relacionada con los viajes, la ciencia ficción y diversas novelas utópicas.

Algunos identifican el término longevidad con esperanza de vida, esta es la media de la cantidad de años que vive una determinada población en un cierto período de tiempo.

Un buen grupo de animales viven más años que el ser humano, entre ellos he escogido a las esponjas hexactinélidas. Una de estas esponjas, que habitan en la Antártida, vivió miles de años. Son conocidas vulgarmente como esponjas vítreas, porque su esqueleto es mineral compuesto por espículas silíceas de seis puntas, llamadas hexactinas, lo que da nombre al grupo. Se conocen unas 500 especies. Todas las hexactinélidas son marinas y tienen preferencia por aguas profundas, entre los 200 y los 2 000 metros; sin embargo, otro grupo de ellas viven sobre substratos blandos, y abundan en aguas someras de las regiones polares. Normalmente crecen a un ritmo extraordinariamente lento y alcanzan enormes longevidades. Un ejemplo de estas esponjas es Scolymastra Joubini, un ejemplar de esta especie de 2m de altura se encontró a 50m de profundidad en el Mar de Ross y se le estimó una edad aproximada de ¡6 000 años!, lo que convirtió a esta esponja en el animal más longevo de la Tierra.

Otro ejemplo es la Almeja de Islandia (Arcticaislandica) que ha sido apodada “Ming”, se trata de un molusco bivalvo de color marrón oscuro a negro que fue hallado en la costa de Islandia en el año 2007. Su nombre se debe a la dinastía Ming que gobernaba China en el momento de su nacimiento. Un estudio realizado por la Universidad de Bangor en Gales, basado en la dendrocronología para contar el número de anillos en la concha del molusco, estimó su edad entre ¡405 y 410 años! Según profesores de la Escuela de Ciencias Oceanográficas de dicha universidad, factores como la alimentación del molusco, la temperatura de las aguas oceánicas y la climatología, determinaron las variaciones en los anillos de crecimiento de la concha. Esta almeja tiene una amplia distribución en las aguas boreales en el Norte del Océano Atlántico, aunque también es posible hallarla en aguas más templadas. En América, ha sido vista en las costas de Carolina del Norte.

El Tiburón de Groenlandia, Somniosus microcephalus, llamado vulgarmente Tollo de Groenlandia o Tiburón Boreal, es una especie de elasmobranquio escualiforme de la familia Somniosidae. Es muy grande, su talla oscila entre los 6 y 7m de longitud. Un reciente estudio acerca de este animal, calcula su edad alrededor de los ¡392 años!, pero, los científicos sugieren que podría haber algunos con edades que alcanzan los ¡500 años! Este tiburón, comúnmente se encuentra en los abismos polares en el norte del Océano Atlántico y el Océano Glacial Ártico, alrededor de Groenlandia e Islandia; pero ha sido visto también en las aguas del sur, como en los mares de Argentina y la Antártida.

La Ballena de Groenlandia, Balaena mysticetus. Una de estas ballenas, un macho específicamente, que vivía en aguas del Ártico tenía ¡211 años! cuando murió. Son de cuerpo robusto, y crecen hasta alcanzar 18 metros de longitud, con un peso máximo de 100 toneladas. Las ballenas de Groenlandia son las únicas ballenas que pasan sus vidas enteras en las aguas árticas. Vive en la región circumpolar del norte, a menudo en aguas poco profundas. Sus migraciones son cortas, y se realizan en sentido contrario a la formación y el movimiento del hielo: al norte en verano, al sur en invierno. En el Atlántico habita desde el mar de Groenlandia hasta el norte de la bahía de Hudson. En el Pacífico, vive junto a las costas de Alaska y de Rusia, en los mares de Bering y Chukchi, hasta el mar de Beaufort. La esperanza de vida de una ballena de Groenlandia se creía que era de 60 a 70 años, de forma similar a otras ballenas. Sin embargo, los descubrimientos de antiguas puntas de arpones de marfil en ballenas vivas en 1993, 1995 y 1999 han desencadenado investigaciones adicionales basadas en las estructuras del ojo de las ballenas, llegando a la conclusión fiable de que por lo menos algunos individuos han vivido 150-200 años y más, lo que las convertiría en los mamíferos más longevos. Otro informe ha afirmado que una hembra de 90 años supuestamente seguía siendo reproductiva. Debido a su posible periodo de vida, las ballenas hembras de Groenlandia se cree que pasan la menopausia, esta hipótesis se apoya en que han sido observados animales hembras de gran talla sin crías.

 

 

El Águila Real, Aquila chrysaetos, puede alcanzar hasta 80 años. Es una especie de ave de la familia Accipitridae. Es una de las aves de presa más conocidas y ampliamente distribuidas de la Tierra. Su área de distribución abarca gran parte de América del Norte, Eurasia y el norte de África. Mantiene poblaciones sedentarias incluso en varias islas como Gran Bretaña, las del Mediterráneo, Japón y Vancouver. Sin embargo, su población en Europa central se ha visto muy reducida en los últimos años por culpa de la actividad humana y se ha extinguido en muchos lugares donde antes era abundante.

Sebastes aleutianus (pez rojo) y Sebastes borealis (pez rojo anaranjado) son peces del Pacífico norte, que se supone han vivido hasta los 205 y 157 años respectivamente. Los Sebastidae son una familia de peces marinos incluida en el orden Scorpaeniformes, distribuidos por los océanos Atlántico, Índico y Pacífico, aunque el género mayoritario Sebastes aparece sólo en el norte del Pacífico.

El Erizo Rojo, este animal espinoso tampoco parece envejecer mucho y se calcula que vive alrededor de ¡200 años!

La Tortuga de las Galápagos, criaturas de lentos movimientos fueron vistas por Charles Darwin, y han vivido hasta ¡177 años!

La Tortuga de Aldabra, Geochelone gigantea, es una tortuga que murió en un zoológico y tenía ¡152 años! Algunos reportes no confirmados indican que algunas de estas tortugas gigantes viven hasta 180 años. Sólo habita en el atolón que le da nombre, Aldabra, en el archipiélago de las Seychelles. Es un atolón de coral en el océano Índico con una gran riqueza natural en flora y fauna autóctonas, lo que la ha valido ser catalogado por la Unesco en 1982 como Patrimonio de la Humanidad. Entre su fauna endémica destaca esta tortuga gigante.

 

 

El esturión del lago, Acipenser fulvescens, es una especie de pez acipenseriforme, que ha vivido aproximadamente ¡152 años!, es de agua dulce, de las zonas templadas de América del Norte, y forma parte de una de las 20 especies pertenecientes a la familia de los esturiones. Al igual que los demás esturiones, esta especie es uno de los eslabones evolutivos más antiguos, con una parte del esqueleto cartilaginoso y su piel con hileras de placas óseas. El esturión del lago puede llegar a pesar más de 100 kilogramos y a tener una longitud de 2m durante su larga vida.

Algunos factores medioambientales, como los cambios climáticos y la contaminación del agua, la destrucción del hábitat, amenazan en la actualidad a estas especies curiosas, sorprendentes y únicas. Las actividades humanas, desde la caza no comercial practicada por muchos, hasta las explotaciones marinas de petróleo y gas, siguen planteando desafíos a la supervivencia de todas ellas.

Recordemos que… “la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla.