Adolfo Salazar

29 de enero de 2016

|

Leonardo Depestre Catony

 

 

Don Fernando Ortiz fue auspiciador de importantes encuentros entre intelectuales nacionales y españoles a través de la Sociedad Hispano Cubana de Cultura, que fundó y dirigió. Uno entre tantos invitados fue el musicólogo español Adolfo Salazar, cuya cercanía con los cubanos se acentuó mediante la amistad y reconocimiento recíproco de valores. Pero Salazar no fue solo un musicólogo notabilísimo, también escribió muy bien, ejerció la crítica y compuso.
Adolfo Salazar llega en abril de 1930 –tiene casi 40 años y tal vez ningún otro crítico musical en la Península disfrute de su prestigio. Encuentra en Cuba a su compatriota Federico García Lorca, con quien reanuda una vieja amistad, frecuenta las salas de concierto, se compenetra con los editores de la revista Musicalia, se integra al contexto musical, se deslumbra ante la musicalidad del trópico y las creaciones de sus compositores. Tiene criterio abierto y sienta las bases para una prologada relación de crítica y apreciación de la música sinfónica cubana, acerca de la cual opina extrafronteras. En La Habana desarrolla un programa de cinco conferencias, reseñadas por la prensa especializada.
En el periódico El Sol, de Madrid, para el cual escribió durante dos décadas, quedan muestras de su hacer. Es allí donde aparece su artículo “Paisajes de Cuba: el son en las fritas”, en la edición del 29 de julio de 1930, dedicado a la obra de Nicolás Guillén. En cuanto a Alejandro García Caturla, la correspondencia entre ambos se extendió por varios años y reveló afinidad de criterios, algo que denota el grado de actualización musical y la comunicación que Adolfo Salazar mantenía con los compositores más allá de la Península, con lo cual contribuyó a la difusión de la obra sinfónica de estos.
Cuando irrumpió la guerra civil se exilió, siendo nombrado agregado cultural del gobierno republicano en Estados Unidos y más tarde se estableció en México.
Como autor se le deben, entre otros, los libros Música y músicos de hoy (1928), La música contemporánea en España (1930), El siglo romántico (1935), La música moderna (1944), La música en la sociedad europea (1942-1946), La música y el ballet (1951), La música en España (1953), publicados en España, Argentina y México.
Póstumamente se publicó una antología de sus artículos titulada Adolfo Salazar – Textos de crítica musical en el periódico El Sol (1918-1936). También escribió música sinfónica, de cámara y canciones.
Salazar murió en México en 1958, a los 68 años.