Orquesta Hermanos Castro: tres décadas de buen quehacer musical (II)
17 de junio de 2016
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En 1937 Miguelito Valdés y Anselmo Sacasas, junto a otros cinco músicos, abandonan la agrupación para organizar la Orquesta Casino de la Playa; y un año después, Mantici también decide separarse para crear, como un desprendimiento, la Orquesta Havana Riverside. A pesar de estas pérdidas, los Castro siempre mantuvieron una excelente alineación de músicos con los que actuarían en Venezuela y otros países; aparecerían en el filme norteamericano “Havana Cocktail” –producido por la Warner Brothers–, y participarían en algunas películas cubanas como Fantasmas del caribe, dirigida por Ernesto Caparrós, estrenada en 1943, y Sed de amor, del realizador Francoise Betancour (1945), para de esta manera, ocupar un lugar destacado en el ámbito fílmico-musical cubano, en los interregnos que ocuparon las décadas del 40 y 50 del pasado siglo.
Aunque no fue el primer jazz band surgido en Cuba, pues ya este tipo de agrupación existía desde el año 1914, la Orquesta Hermanos Castro fue la primera gran banda en su tipo (big band) en los años 30 del país.
La carrera discográfica de la orquesta resulta muy importante para la fonografía musical cubana; sus discos para los sellos norteamericanos (Victor, Decca, RCA Victor, Variety, y Columbia) y cubanos (Panart, Puchito y Kubaney) dicen mucho de la prolífica producción discográfica de esta agrupación musical cubana.
Por las filas de esta agrupación pasaron destacados vocalistas que marcaron su impronta en importantes proyectos discográficos, entre los que sobresalen Miguelito Valdés, Reinaldo Enríquez, Carlos Díaz, Eddy Urquía, Aurora Lincheta, Wilfredo Fernández, Orlando Vallejo, Carlos Alas del Casino, Dinorah Nápoles, Totty Lavernia, Olga Guillot, Orestes Macias, Kino Morán, Rosita Fornés, Felo Martínez, Manolo Torriente, Orlando Planas, y el dominicano Juan Polanco.
No es posible mencionar todos los números que alcanzaron gran popularidad en tres décadas de quehacer musical, baste mencionar que solo en la voz de Carlos Díaz triunfaron los boleros No te importe saber, de René Touzet y Comprensión de Cristóbal Dobal; también son memorables Tú me acostumbraste de Frank Domínguez, en la voz de René Cabell, Sabrosona de Richard Egües, cantada por el trío de voces conformado por Carlos Díaz, Felo Martínez, y Kino Morán, y Miénteme de Chamaco García, en una soberbia grabación de Olga Guillot, y que le proporcionó a esta cantante el primer Disco de Oro en su carrera.
Por muchos años los Hermanos Castro se mantuvieron contratados por la emisora Radio Progreso, allí dejaron cortadas decenas de placas de aluminio, no comerciales, que contribuyen a enriquecer el amplio patrimonio fonográfico de la radio cubana. Finalmente, el peso de los años provocó el retiro de los hermanos fundadores y de otros músicos, entonces ocurre la entrada de otros destacados y la agrupación, ya sin su nombre original, pasó a ser orquesta de planta de Radio Progreso.
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