Lo que era de esperar…
15 de febrero de 2021
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Pienso que la noticia no es que el Senado de Estados Unidos haya absuelto a Donald Trump, porque era lo más seguro que en ese país, en ese sistema de gobierno y en los conceptos que lo sustentan, un Trump no pueda ser condenado, porque sería algo así como exhibir lo roído que está el sistema estadounidense.
Es la segunda vez que pasa, y el magnate ex presidente se burla del empeño de los demócratas en encontrar la cantidad de republicanos necesarios para hacer válido el impeachment.
El ex mandatario, una vez conocido el veredicto de lo que se sabía iba a suceder tuiteó: que se trataba de «la mayor cacería de brujas en la historia de Estados Unidos».
No pocos especialistas en el tema concuerdan con lo que dice BBC este domingo: «el Senado de EE.UU. absuelve a Trump por miedo a enfadar a las decenas de millones que votaron por él».
No fue suficiente que en las sesiones del Senado se hubiesen presentado videos y testimonios impactantes de lo que sucedió en el Capitolio de Estados Unidos el pasado 6 de enero, cuando una turba trumpista, donde se daban la mano elementos fascistas, fundamentalistas armados, invadió el Capitolio, destrozó oficinas y arremetió contra quienes se encontraron, hecho que causó la muerte de cinco personas y otras varias heridas.
La evidencia de que fue Trump quien instigó y dirigió el ataque al Capitolio, siempre estuvo demostrada, pues el 19 de diciembre, el todavía presidente republicano llamó a sus millones de seguidores en las redes sociales: «vayan a Washington el 6 de enero, el día en que el Congreso se reuniría para certificar los resultados de las elecciones», para una «gran protesta en DC», en lo que normalmente es un evento simbólico y protocolar,
El propio día de los hechos, Trump habló ante una multitud de miles de seguidores furiosos frente a la Casa Blanca y los llamó a que marcharan al Capitolio y lucharan por él.
Un día antes de que se diera a conocer que el Senado no había logrado condenar a Trump, una avioneta sobrevoló el club Mar-a-Lago en Palm Beach (Florida), donde reside ahora el expresidente con un letrero que dicía: «Condenen a Trump y enciérrenlo», en referencia al juicio político que se estaba desarrolllando, según cuenta un despacho de EFE.
Refiere la propia agencia que la petición de «enciérrenlo», que Trump usó incansablemente contra su rival política Hillary Clinton en las elecciones de 2016, apareció en el cielo justo cuando los abogados del republicano comenzaban su defensa en el Capitolio de EE.UU
No obstante el rechazo de algunos sectores de la sociedad estadounidense e, incluso, que muchos republicanos optaran ahora por tomar distancia de Trump, lo real es que ni el Senado lo puede condenar, ni se pueden borrar los más de 70 millones de votos que obtuvo en las elecciones.
El propio día que supo que no lo condenarían, ya estaba escribiendo un tuit en los que «avisa» que muy pronto volverá a la política… es decir, a su campaña electoral para los comicios del 2024.
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