Leal es donde está su huella

23 de noviembre de 2020

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Maria Karla Villar Mora

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#LealesALeal, Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Cultura, Eusebio Leal Spengler, Oficina del Historiador de La Habana

 

Desde este 16 de noviembre, cuando La Habana arribó a su aniversario 501, los transeúntes de la parte más añeja de la ciudad pueden redescubrir la historia de algunos de sus sitios y edificaciones más emblemáticos, guiados por el eterno Historiador de la Ciudad de La Habana.
Códigos QR visibles en tarjas colocadas en calles y paredes del Centro Histórico habanero permiten visualizar pequeños fragmentos de las explicaciones que durante años el Doctor Eusebio Leal compartió con la audiencia que le seguía a través del programa televisivo “Andar La Habana”.

 

“Memoria de las piedras es un proyecto de colaboración entre la empresa Restaura y el equipo Medio punto, en el cual han participado otras instituciones de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, específicamente de la Dirección de Comunicación, donde ha jugado un papel muy importante la emisora Habana Radio, el Departamento de Audiovisuales, la Dirección de Informática, además el equipo de Inversiones”, explicó a Habana Radio Arantxa Sánchez Puentes, una de las diseñadoras industriales al frente de la iniciativa.

 

 

A propósito de la celebración, fue inaugurada la primera fase de este proyecto el cual abarcará en el futuro otros sitios e inmuebles de la ciudad, además de que “se pretende ampliar en cuanto a contenido y utilidades, incorporándole subtítulos en otros idiomas para lo cual cuenta con el apoyo de la Agencia de Viajes San Cristóbal y del proyecto Cultura entre las Manos”, agregó la especialista.
Este homenaje al Doctor Leal está visible ya en seis locaciones del Centro Histórico habanero: el Centro del Visitante (antiguo edificio Prácticos del Puerto), el Templete, el otrora Palacio del Segundo Cabo, la Plaza de Armas, la calle Obispo y el antiguo Palacio de los Capitanes Generales. Debe su nombre a la conocida frase de Fina García Marruz acerca de Eusebio Leal: “Cuando lo olviden los hombres todavía lo recordarán las piedras”.

 

 

“Precisamente lo que quisimos fue reflejar el testimonio de Eusebio en las fachadas y en las calles de La Habana Vieja – agrega Arantxa Sánchez Puentes – y nos pareció interesante usar la tecnología para esto, quizás también para atraer un poco a un público más joven, realizar las cosas de una forma más novedosa, que a la gente le llame más la atención. Su utilización es muy sencilla, simplemente se escanea el código QR de estas tarjas colocadas en las distintas fachadas o calles y te llevará a un video que es un extracto de los «Andar La Habana» que desarrolló Eusebio a través de los años”.

 

 

Desde hace apenas un mes, las distintas instituciones implicadas en el proyecto han trabajado de forma conjunta para que los habaneros y transeúntes pudieran disfrutar de este privilegio convertido en homenaje a quien fuera uno de los oradores habaneros más prodigiosos de su tiempo. Más allá de la entrega y compromiso del equipo que laboró en ello, “satisfactoriamente los tiempos de implementación de este proyecto son realmente cortos dada sus facilidades productivas”, aseguró el diseñador industrial Adrián García Álvarez.

 

 

Sobre las herramientas y métodos para acceder a este servicio, el especialista asegura que “por el momento hemos constatado que se pueden leer los códigos QR implementados en las piedras a través de sitios webs que están especializados en la lectura de estos códigos. Existen también algunos móviles que incluyen aplicaciones nativas para la lectura de códigos QR; hay otras formas que son las aplicaciones propiamente descargables desde Google Play o desde la App Store que pueden utilizarse para este fin; y existe una tercera variante que hemos constado que es la utilización de una aplicación bastante extendida en todo el país que es Zapya, la cual ya incluye un lector de códigos QR”.

 

 

A las puertas de su aniversario 501 La Habana dijo adiós en este 2020 a su más fiel y constante enamorado, mas la pérdida ha sido solo física pues sus conocimientos, legado e ideas siguen latentes aun entre los habaneros, y permanecerá así gracias al uso de las nuevas tecnologías.
“Recordar a Leal es una necesidad porque fue él quien precisamente nos hizo recordar”, comentó a Habana Radio Sandra Quintana Echemendía, otra de las diseñadoras industriales al frente del proyecto Memoria de las piedras.

 

 

“Él se convirtió en un gestor del patrimonio, hasta el punto que nos sirvió de guía en el rescate de La Habana; más allá del recate de su arquitectura él se centró en el de los valores sociales y culturales que nos dignifican como ciudad y como nación. Desde nuestro punto de vista como diseñadores prestamos mucha atención a los pequeños detalles y eso hace que nos sintamos muy identificados con su forma de actuar, con su figura, con su interés por abarcar hasta el más mínimo de los detalles. En este caso, el uso de las nuevas tecnologías puede hacer extensivo su legado al punto que ya no hay justificación para desconocer su obra; ahora más que nunca debe volverse una aspiración para cada uno de nosotros lo bello y lo útil. Al decir de Fina García Marruz, Leal es donde está su huella y qué mejor forma de sentirlo eterno que andando las calles que tanto amó”, culminó.