Un amplio frente contra Trump
31 de agosto de 2020
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Indudablemente, la Convención Demócrata logró estructurar -al menos en el seno del propio partido azul-, un amplio frente de sus diversas tendencias y corrientes políticas e ideológicas con el propósito de enfrentar al candidato republicano Donald Trump en un ambiente de unidad que lo fortalece y puede acercarlo a sus propósitos, como alternativa para ocupar la Casa Blanca en el próximo mandato presidencial que surja de los comicios de Noviembre.
No debe olvidarse que estas elecciones son también legislativas y están en juego la tercera parte de los escaños senatoriales y la Cámara de Representantes completa, y aunque no se augura una variación sustancial pueden igualmente ser influidas por una atmósfera unitaria que quedó como saldo de la Convención Demócrata.
El hecho cierto es que en ese evento, realizado por vez primera de modo virtual, comparecieron desde la tribuna en apoyo de la candidatura Biden-Harris las más importantes figuras demócratas del actual escenario político estadounidense, crispado y tenso como pocas veces en su historia, formando un variopinto abanico abarcador que va desde Bernie Sanders y Barack Obama hasta Javier Carter, los Clinton, John Kerry y los propios candidatos actuales a los máximos cargos. Se reunieron así tres ex presidentes en este bando.
Causó sorpresa la aparición en la misma tribuna del general Colin Powell, quién ocupó importantísimos cargos militares y civiles en pasados mandatos y aunque de polémica actuación sigue siendo persona representativa e influyente en sectores de la sociedad, que incluyen a ex militares, afrodescendientes y zonas del Partido Republicano.
Powell ha sido insultado varias veces por Donald Trump y no perdió esta oportunidad para ajustarle cuentas.
Como es habitual en la política de Estados Unidos, las convenciones dejan siempre un saldo favorable en lo inmediato al partido que la realiza, aunque el hecho de hacerse esta vez de manera virtual hace difícil las comparaciones con las anteriores.
Sin embargo, es coincidencia generalizada entre los analistas y medios de comunicación que la convención demócrata resultó un éxito político y mediático -aún en medio de las limitaciones de la COVID 19- muy difícil de superar por la convención republicana, donde Trump apareció en las cuatro sesiones, en su afán narcisista de concentrar sobre sí todas las miradas, aun siendo único candidato de la campaña de ese partido.
Celebrada desde la ciudad sureña de Charlotte, Carolina del Sur, esta convención fue acompañada por protestas y desórdenes callejeros antirracistas y contra la brutalidad policial.
Tras las convenciones, quedan aún dos meses de pugilato electoral yanqui donde se sucederán los golpes bajos, encuestas de todo tipo, noticias falsas, muchos trucos y malabares que, como de costumbre, caracterizan a estas pugnas dentro del sistema imperial.
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