Entre miasmas
15 de mayo de 2020
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Los magnates de la comunicación Rupert Murdoch y Gustavo Cisneros, con lo peor del mundo en común, combatieron acérrimamente contra Hugo Chávez y, de una manera u otra, siguieronconspirando a favor de la eliminación por cualquier medio del proceso revolucionario venezolano,
Cisneros, de padre cubano y nacionalidad venezolana, con añadiduras de la dominicana y española, mantuvofuertes hilos conlos golpistas que durante dos décadas han intentadoderrocar al GobiernoBolivariano, entre ellos el fallido golpe que tuvo entre sus sucios menesteres el secuestro del presidente Hugo Chávez,
De entonces para acá ambos entes han convivido en el entramado contrarrevolucionariogestado durante el anterior gobierno de Barack Obama y aumentado con el de DonaldTrump contra el gobierno de Nicolás Maduro, con el consiguiente apoyo al bloqueo y robo de los bienes de Venezuela, parte de los esfuerzos imperiales para rendir por hambre y enfermedad al pueblo venezolano, sin descontar las continuadas amenazas militares y agresiones mercenarias, con la complicidad del régimen colombiano.
En lo individual, Murdoch se vale del poder del dinero, y así se libra de variados entramados de la competencia opositora, como cuando se tratóde despedazar su imperio mediático, líder de la propaganda de la derecha capitalista, al descubrirse su participación en escuchas ilegales en Londres. Allí demostró una fortaleza devenida de sus fuertes lazos con los intereses de los centros de poder, de los fabricantes de armas y capos del sistema financiero mundial.
Utiliza el periodismo como mecanismo de presión para sacar provecho económico y político, por lo cual no es casual que metiera en su ejército al ex presidente español José María Aznar como asesor en News Corporation, quien, según fuentes consultadas, tiene en todo el mundo activos valorados en 55 000 millones de dólares e ingresos anuales de 25 000 millones, sobre todo en Estados Unidos, Reino Unido y Europa continental, Australia, Asia y Latinoamerica.
El alto mando editorial traza las líneas de pensamiento que alimenta al público cautivo, y así el emporio de medios fue utilizado por los halcones que propiciaron primero la invasión a Afganistán y después la de Iraq, justificando la guerra contra la comundad nternaconal. La lista que sigue al efecto es larga y también bañada en sangre de inocentes. como parte de la feroz campaña de los medios contra países que no bailan al son del capitalismo salvaje.
Murdoch detesta la izquierda y por ello arremetió contra Fidel y Chávez, y en la figura del venezolano siguió la pauta de Aznar, utilizando entre otros a 20th Century Fox, Sky, “The Sunday Times”, “The New York Post”, “The Financial Times” y la agencia Reuters.
Murdoch sigue siendo cúmbila de Cisneros.Ambos magnates y pertenecen a organizaciones secretas. Coinciden en tener la Soberana Orden Militar de Malta y, casualmente, tienen un amigo en común, el ya mencionado Aznar, quien junto a Bush y Blair inventaron la falsa excusa para atacar a Iraqy apoderarse de su petróleo. Mezclados por intereses de medios de comunicación y la política, llegaron lejos, gracias a los contratos obtenidos por la presión de sus medios.
Ambos son ansiosos de poder y dinero. El primero fue amigo de Ronald Reagan. El segundo de George Bush. En el 2002, Cisneros utilizó sus medios para la propaganda del golpe contra Chávez, y los medios de Murdoch lo justificaron.
En aquel entonces, Chávez relató: “Nunca se me va a olvidar la petición que me hizo uno de los grandes gurúes del golpe mediático, magnate internacional, dueño de medios, que se creía también dueño de Venezuela, dirigente del golpe de Estado y capo de la oligarquía apátrida y traidora, que pretendía que yo nombrara en CONATEL a uno de sus empleados”.
Tomos llevaría relatar las trapacerías de ambos personajes. En el caso de Cisneros, éste secuestró ediciones enteras que relataban el nexo de su familia con lo peor de lo peor, incluidos el narcotráfico y la camarilla gusaneril que tiene su capital en Miami.
En “Narcotráfico S.A. La nueva ruta del Opio”, el profesor Pedro Grima presenta un resumen del libro, cuidando de reproducir completo el capítulo donde se detallan los nexos del Clan Cisneros con el narcotráfico, por lo cual desapareció del mercado venezolano como por arte de magia.
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