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Aprender a alimentarse

3 de junio de 2019

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Poco a poco, la humanidad va comprendiendo la importancia de una buena alimentación, balanceada y sin excesos. Las madres, generalmente con tendencias a que sus hijos engorden, parecen comprender que las adiposidades nada tienen de estéticas, e inducen a sus proles al gimnasio y a evitar la famosa comida “chatarra”.

Vale añadir a esos pasos de avances, el resultado de un estudio científico que destaca claramente como el alto consumo de sodio –o sal, que es lo mismo– unido a la falta de potasio, es un peligro para quienes padecen de enfermedades cardiovasculares.

Los expertos esclarecen que aunque el sodio y el potasio actúan de forma independiente, los niveles elevados de potasio contrarrestan parte del efecto del sodio alto; contrariamente, los efectos adversos del exceso de sodio, no se compensan con una dieta rica en potasio.

Variedades como las judías pintas contienen más de 1300 mg de potasio por cada 100 gr. y un nivel de sodio mínimo. Los frijoles negros son ricos en potasio y bajos  sodio. Todos devienen fuente de proteínas, fibra, vitaminas, y además, niveles bajos de grasa, estabilizan el azúcar en sangre, ideales para las personas diabéticas.

La soya, es otra legumbre con un porcentaje elevadísimo de potasio, sodio y proporciona fitoestrógenos, beneficiosos para disminuir algunos efectos del síndrome premenstrual.

Por su parte, el  plátano es  rico en potasio y muy bajo en sodio, recomendable para reducir la hinchazón, no  engorda, y es bueno para obesos y enfermos de gota o reumatismo. Un plátano diario supera cualquier dosis de complemento de potasio.

La zanahoria  es alta en  potasio y sodio. Sugieren comerlas crudas, aunque  una ligera cocción mantiene sus vitaminas.

En cuanto a la col, combate el  estreñimiento; el brécol, es rico en potasio como la patata (papa) y poco sodio; es recomendada para eliminar líquidos si se cocina hervida o al horno y por supuesto, sin sal.

Quien tome como base para una buena alimentación estos aportes científicos para una adecuada nutrición, admitirá que no solo con medicamentos se obtienen resultados favorables, pues los vegetales, las legumbres, y las frutas devienen excelentes aliados para la salud, sin olvidar que prevenir es evitar el mal, algo mucho más conveniente.

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