Edificio de Paseo del Prado esquina Neptuno

27 de mayo de 2019

|

Zenaida Iglesias Sánchez

Antiguo Restaurante Caracas.
Después: Restaurante Prado y Neptuno.

 

 

El Restaurante “Prado y Neptuno” se encuentra ubicado en la céntrica esquina habanera que ahora lo nombra, hito de la ciudad reconocido por todos, la misma esquina que inspiró a músicos y poetas, siempre frecuentada por los transeúntes citadinos. Cuando reabrió sus puertas, mostraba en su interior la originalidad del moderno diseño interior aportado por el fallecido arquitecto italiano Gottardi, preservando en su exterior las características arquitectónicas de las primeras décadas del pasado siglo XX, cuando fue construido el edificio.

 

 

En las últimas décadas del XIX existió aquí un bodegón de mampostería y tejas que todos conocían como “La Bodega de Alonso”. Su propietario, Alonso Suárez de la Campa, fue un emigrante español, que como tantos otros llegó a Cuba en busca de fortuna. Allí se estableció y abrió este local, mitad bodega y almacén, con prestigiosos productos de su tierra.

 

 

Finalizando el siglo, su estado constructivo era precario y aunque todavía era muy frecuentado por sus clientes, esto condicionó su desalojo en 1893 y la fabricación de un nuevo edificio de tres plantas. En los bajos estuvo instalado por un tiempo el Casino Español, en los altos se instaló el Ateneo y Círculo de La Habana, entre otras dependencias, con el paso de los años.

 

 

El 19 de marzo de 1914 se inauguró en los bajos el Café Restaurante “Las Columnas”, propiedad de los señores Miguel Junco y Ramón Gutiérrez, debió su nombre porque en su interior existieron numerosas columnas decoradas con motivos geométricos. Contó con la mejor cocina de los restaurantes habaneros, un local para preparar helados, una dulcería y una vidriera de tabacos. Se ampliaron después hacia Neptuno con una Barbería y salón de billar.

 

 

En la década de 1940 comenzó a llamarse Café “Miami”, destacándose por la elaboración de platos con frutas tropicales durante todo el año; y en 1960 se llamó “Caracas”; después “Budapest” hasta los años 1980 en que se clausuró por las malas condiciones allí existentes.

 

 

Pasaron varias décadas para que reabriera sus puertas el emblemático comercio gastronómico de Prado y Neptuno que en la actualidad continúa prestando servicios.