Una deuda que provoca suicidios
8 de mayo de 2019
|
El sistema educacional de Estados Unidos tiene su cimiento principal en el pago de los estudiantes en cada nivel, escuela, o matrícula anual.
En este contexto, un fenómeno no nuevo pero sí en espiral, mueve las bases del propio sistema y crea incertidumbre en familias, maestros y dueños de centros educacionales.
Según datos recientes, la deuda estudiantil en Estados Unidos supera los 1,6 millones de dólares, lo que significa una verdadera angustia para los que las han contraído, para los que aspiran a adquirirla y para los mecanismos impositivos beneficiados.
El asunto ha tomado tal envergadura que una encuesta reciente calcula que uno de cada 15 deudores de préstamos estudiantiles ha considerado el suicidio como salida al problema.
Se ha constatado que la mayor parte de la deuda estudiantil corresponde a personas con saldos en el extremo inferior de la escala. Sin embargo, la cifra equivale a 2,8 millones de personas con una deuda de alrededor de 495 000 millones de dólares en marzo pasado, de acuerdo con datos del Departamento de Educación. Aún más preocupante es que se trata de un aumento de casi 61 000 millones desde finales de 2017.
De acuerdo con despachos de prensa, los préstamos estudiantiles son el segundo tipo de deuda por tamaño en Estados Unidos después de las hipotecas y, a menudo, son más caras de pagar en relación con la cantidad adeudada, porque las tasas de interés son generalmente más altas. Sin mencionar que, a diferencia de comprar una casa, la educación no es un activo tangible que se pueda vender.
El asunto, como todo en época preelectoral en Estados Unidos, se ha convertido en un relevante tema político a medida que se acerca la elección presidencial del próximo año.
Los análisis aparecidos en la gran prensa ponen ejemplos sobre los costes mensuales asociados a los diferentes niveles de deuda estudiantil.
En el caso de un anticipo que crea los más diversos niveles de la deuda, cuando es por 10 años, paga un 6% de interés. Esto implica que una hipoteca de 30 años de 400 000 dólares, con las tasas de interés actuales significaría alrededor de 2 000 dólares al mes.
La educación privada, en cada uno de sus niveles, constituye una verdadera pesadilla para quienes se empeñan sobremanera por los préstamos solicitados por familiares fundamentalmente, que luego se ven ante la imposibilidad de pagar, implicando una deuda mayor.
Que el tema se convierta en asunto de política interna preelectoral, tiene, por supuesto, la sustentación en un sistema donde el dinero lo es todo.
Comentarios