Johannes Bisse
15 de noviembre de 2018
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Existe una larga tradición de científicos alemanes con importantes servicios prestados en Cuba desde el siglo XIX hasta nuestros días.
Entre 1822 y 1824, el botánico Friedrich Poeppig recorrió la provincia de Matanzas y tomó muestras de plantas que después fueron descritas en Alemania.
Eduard Otto y Juan Gundlach llegaron en 1839. El primero envió a su país una colección de 328 plantas endémicas, prueba de la laboriosidad con que recorrió los sitios más intrincados del país. El segundo, Gundlach, hizo historia en las ciencias cubanas, con numerosos textos sobre fauna.
Hubo varios más, pero nos centraremos en uno de nuestros tiempos, el doctor Johannes Bisse, profesor de la Universidad de Jena y nacido en Cottbus, quien con apenas 30 años llegó a Cuba por el año de 1965. El destacado botánico explicaba así su vocación:
“Cerca de mi casa hay un parque muy viejo que construyó un príncipe de la antigüedad, con una jardinería muy avanzada; es uno de los parques más hermosos del mundo, en su perspectiva y como paisaje; aunque tiene interés botánico también en sus árboles exóticos: se llama el Parque de Branitz. Siendo niño siempre estuve correteando por allí, me gustaban las plantas desde entonces. Mi vida era aquel parque.”
El doctor Bisse, consultor del Jardín Botánico de Cuba, realizó un estudio profundo de la flora cubana, el cual resumió en su libro Arboles de Cuba, publicado en 1988. Dicho texto es una contribución importante al desarrollo del tema en nuestro país.
Acerca de la obra —el Jardín— que el doctor Bisse con amor y dedicación contribuyó a erigir, él mismo comentaba así:
“Este es el Jardín Botánico más grande que se hace en el trópico, ninguno otro es igual y en otras regiones del mundo de climas templados o fríos no puede haberlo igual, porque donde es más variada y exuberante la flora es en el trópico: en los invernaderos puede haber algunas plantas tropicales, pero pequeñas, no grandes árboles como tendremos aquí.”
El libro Árboles de Cuba, del doctor Bisse, describe 550 árboles del archipiélago cubano. Incluye las denominaciones científicas y comunes de cada una de las especies, así como la distribución geográfica de las mismas.
Resultado de 12 años de estudios e investigaciones, el libro fue revisado por su esposa y colega, la especialista Lutgarda González, luego de la muere inesperada del doctor Bisse, el 19 de diciembre de 1984.
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