Emisión por el Día Mundial del Medio Ambiente

21 de junio de 2018

HF21 (Medium)

Parajes de incomparable belleza del archipiélago cubano, declarados Reserva de la Biosfera con especies de animales protegidas que tienen sus hábitats en esos sitios aparecen en las seis estampillas y en la hoja souvenir de la emisión Día Mundial del Medio Ambiente.

Comenzamos con el sello de 10 centavos de valor facial donde aparece una tortuga marina que habita en la Reserva de la Biosfera Península de Guanahacabibes en el extremo occidental de la Isla.

Continuamos con el timbre de 35 centavos donde se destacan los flamencos de la Reserva de la Biosfera Buenaventura.

HF22 (Medium)

Asimismo, la estampilla con el valor facial de 90 centavos muestra la Reserva de la Biosfera Cuchillas del Toa, en la región oriental del país y a su lado la hermosa policromía de una polímita, especie propia de ese sitio.

La Reserva de la Biosfera Sierra del Rosario, en la occidental provincia de Artemisa y una jutía conga, una especie cubana protegida, corresponde a la propuesta del sello de 15 centavos.

Un cocodrilo cubano propio de la Reserva de la Biosfera Ciénaga de Zapata, el mayor humedal de Cuba y el Caribe, se destaca en el sello de 20 centavos.

En el valor de 85 centavos se aprecia un paisaje de la Reserva de la Biosfera Baconao, en la región central del país, al que se agrega una cartacuba, diminuta ave protegida que habita en esos parajes.

HF2 (Medium)

La hoja souvenir nos regala un bello rincón de la Reserva de la Biosfera Península de Guanacahabibes, mientras que el sello, con el valor facial de un peso, se adentra en las profundidades marinas del lugar para descubrir un segmento de los arrecifes coralinos.

La impresión se realizó en papel cromo por el sistema OFF-SET, en formato vertical, los valores faciales de 10, 85 centavos y un peso, con las medidas 31 por 48 milímetros, mientras que los sellos de 15, 20, 35 y 90 centavos aparecen en formato horizontal con las medidas 48 por 31 milímetros, todos con perforación 12,5, Circula a partir del 5 de julio de 2017.

Técnicas usadas en la impresión de los sellos de correos. El heliograbado

El heliograbado es otra de las técnicas usadas en la impresión de los sellos de correos, de la cual les ofrecemos detalles.

Conocida también como impresión heliográfica, esta técnica es bastante moderna. Se basa en el grabado de planchas recubiertas de cromato gomoso o asfalto que se obtiene con productos químicos luego de una exposición a la luz del sol o de lámparas especiales.

La impresión heliográfica fue usada por primera vez en Baviera, Alemania, para una emisión de 1911.

Posteriormente, se empleó en Marruecos en 1923 para la reimpresión de los valores emitidos en 1917, impresos en calcografía.

Es importante tener en cuenta que la impresión heliográfica atenúa los colores y confiere tonos planos, poco nítidos y sin relieve a las reproducciones.

Continuará.

Curiosidades de la Filatelia

No son pocos quienes aseguran que el fin de los sellos de correos no está muy lejano en estos tiempos modernos en los que día a día las nuevas tecnologías se van imponiendo progresivamente.

Por supuesto, que el envío de la correspondencia no escapa al desarrollo tecnológico del siglo XXI.

En este sentido los servicios de Correos de Dinamarca y Suecia desarrollan un proyecto con el fin de sustituir las estampillas para el franqueo de la correspondencia por un nuevo sistema.

Este permitirá a los usuarios del Correo tener un código de porte mediante un mensaje telefónico celular, al tiempo que las máquinas de la oficina postal serán las encargadas de interpretar dicho código, de manera que la carta llegue a su destinatario.

Dinamarca implantó este nuevo sistema hace algunos años, mientras que Suecia no tiene un plazo determinado al respecto.

Las Administraciones Postales de los dos países nórdicos saben que el riesgo de falsificación de códigos no será mayor que el mètodo tradicional ya que ambos sistemas pasan por varios escáneres durante el proceso de envío,

Pero, mientras Dinamarca y Suecia abogan por la desaparición de las estampillas, otros servicios postales como los de Estados Unidos, Holanda, Francia y Reino Unido intentan captar clientes permitiendo la personalización de las estampillas.

En fin, que a pesar de los pronósticos pesimistas el Correo tradicional y la Filatelia siguen gozando de buena salud y esto se demuestra en las emisiones postales que anualmente ponen en circulación los países miembros de la Unión Postal Universal y las exposiciones filatélicas nacionales, regionales e internacionales que tienen lugar en todos los confines del planeta en las que compiten colecciones altamente prestigiosas.

Reestructuración del Correo antes de su reincorporación al Estado. Una página de la Historia Postal de Cuba

El servicio de Correos Marítimos comenzó a funcionar en 1765. El día primero de cada mes salía del puerto de La Coruña en España un navío con toda la correspondencia de las Indias Occidentales para La Habana.

Cuando estos navíos estaban listos para zarpar se enviaban a bordo las cajas que contenían la correspondencia bajo la vigilancia de un oficial del Rey para evitar pérdidas y extravíos.

El cargo creado en La Habana, el más importante de América en la actividad postal, se denominaba Administrador Principal del Correo Marítimo y Terrestre de la Isla de Cuba.

Su jurisdicción comprendía el territorio del Mississippi, las Islas de Barlovento, los reinos de Nueva España y Guatemala, así como Cartagena de Indias y Tierra Firme.

Para desempeñar este cargo el Marqués Gerónimo de Grimaldi nombró a José Antonio de Armona y Murga, quien nació en Andalucía en 1726, hombre de grandes facultades de organizador y ejecutivo, quien se destacó como una de las personalidades más sobresalientes de la época en la entonces colonia española.

El nombramiento de Armona fue expedido con fecha 17 de octubre de 1764, recibiéndose en La Habana el 14 de febrero de 1765, para tomar posesión del cargo el día 23 del propio mes y año y comenzar sus funciones el 1º de marzo de 1765.

Las primeras medidas tomadas por Armona fueron la realización de un inventario y la organización del servicio postal.

El propio día 1ro. de marzo, cuando se puso al frente del servicio de Correos, Armona abrió un Libro de Cuentas que hoy se conserva expuesto en el Museo Postal Cubano José Luis Guerra Aguiar de La Habana como un documento de alto valor para conocer mejor la historia del Correo cubano.

Continuará.