Las nuevas tecnologías en una emisión postal

11 de mayo de 2018

HF2 (Medium)

Los filatelistas que apuestan por temáticas como Ciencia y Técnica, Informática, Electrónica y otras tienen una propuesta en las cuatro estampillas de la emisión Tecnologías, puesta en circulación por Correos de Cuba.

Los Videojuegos ocupan un espacio en el sello de 40 centavos de valor facial, seguidos del acceso a Internet en el timbre de 75 centavos.

La Televisión Digital, es el motivo de la estampilla de 45 centavos, para concluir con el sistema WI-FI al que se dedica el sello 65 centavos.

HF21 (Medium)

El Ministerio cubano de Comunicaciones acomete en la actualidad un amplio plan de desarrollo a través de sus empresas con el fin de que estas y otras tecnologías lleguen a todos los sectores de la población con el objetivo de mejorar la calidad de vida y el desarrollo técnico y cultural de los cubanos.

La impresión se realizó en papel cromo por el sistema OFF-SET, en formato horizontal con las medidas 48 por 31 milímetros y perforación 12.5, circula a partir del 15 de marzo de 2017.

Importancia de los accesorios filatélicos

Todo buen filatelista debe conocer el uso correcto de un conjunto de accesorios que garantizan el éxito de su colección, de los cuales no es posible prescindir.

Uno de ellos es el catálogo, una lista numerada, ilustrada y ordenada de todos los sellos emitidos por uno o varios países o acerca de un tema.

Por lo general, el catálogo sigue la cronología de las emisiones con la reseña y la numeración consecutivamente de los sellos de cada serie según el orden creciente de su valor facial, incluidas las cotizaciones de cada emisión y sello.

Continuamos con el clasificador o stock book, su nombre en inglés.

Son libros cuyas páginas están hechas de cartulina gruesa, generalmente de una textura corrugada que impide que el sello se adhiera, a las que se agregan varias tiras de celofán que permiten la clasificación y almacenamiento de los sellos.

Toca su turno a la lupa, instrumento que se usa para el estudio detallado de los sellos, ampliando su imagen según sea necesario.

Las pinzas se utilizan para manipulas los sellos, los que no deben ser tocados con los dedos, pues se corre el riesgo de romperlos o mancharlos con la grasa de las manos.

Por último, los medios para fijar los sellos en el álbum tienen dos variantes, la primera comprende el uso de charnelas, pedacitos de papel transparente engomado, que al ser humedecidos, una parte se fija al sello y al doblarlas la otra se adhiere al álbum.

La segunda variante corresponde a los protectores plásticos o hawid, mucho más costosos que las charnelas, pero imprescindibles para aquellos filatelistas que aspiran a exponer sus colecciones.

Son tiras de papel con celofán al frente en las que se introducen los sellos, se recortan al tamaño requerido y se adhieren a las hojas del álbum sin que el sello sea humedecido o pegado.

Así deben ser montadas las colecciones para ser expuestas en eventos filatélicos.

Curiosidades de la Filatelia

El Príncipe Rainier II de Mónaco no solamente fue poseedor de una fabulosa colección de sellos, sino un promotor decidido del pasatiempo-ciencia.

Sí, porque convirtió su pequeño Estado en un centro donde convergieron todos aquellos factores internacionales interesados en el coleccionismo de sellos de correos.

Por otro lado, creó un excelente museo postal y filatélico, al tiempo que supervisaba personalmente todas las emisiones de sellos del Principado.

La colección que heredó el Príncipe Rainier II de Mónaco se inició en 1912, su padre Alberto I se encargó de enriquecerla, pero su hijo no cesó de aumentarla al extremo que hoy no tiene punto de comparación en el mundo en cuanto a los sellos y la historia postal de la pequeña ciudad- estado europea.

A la maravillosa colección del Príncipe Rainier II de Mónaco se agregan valiosos conjuntos de estampillas de Francia y de los antiguos estados italianos, en particular Cerdeña.

Reestructuración del Correo y su reincorporación al Estado. Una página de la Historia Postal de Cuba

Luego de la creación de los Correos Marítimos entre La Coruña y La Habana se promulgó, el 24 de agosto de Mil 764, el documento titulado Reglamento Provisional del Correo Marítimo de España a sus Indias Occidentales que más tarde, sucesivas Reales Cédulas contribuyeron a mejorarlo y perfeccionarlo.

La Habana se convirtió en el centro de distribución de toda la correspondencia que, procedente de España, venía para las Indias Occidentales, entre ellas Campeche, Veracruz, Yucatán y Guatemala, donde recogían toda la correspondencia para España.

Las cartas encaminadas a las Islas Filipinas iban vía México a través del puerto de Acapulco, y de allí a su lugar de destino.

Habían otras rutas de correos, como de La Habana a Trinidad, que alternaba con Fernandina de Jagua, hoy Cienfuegos, se agregan las que seguían su curso para Cartagena, Portobelo, Costa Firme y el Perú, y finalmente aquellas las cartas que venían para las poblaciones del interior de la Isla.

La legendaria ciudad de Trinidad, en el centro-sur de Cuba, fue escogida para la salida regular de los Correos para la América Central y allí, desde un lugar conocido como Boca de Guaurabo, en el río homónimo, salía un barco correo desde ese lugar, que hoy está situado, precisamente, al final de las calles Boca y Guaurabo.

El mismo sitio donde se encuentra, en ruinas, el edificio donde funcionó la estafeta, conocido como Lomita del Correo.

Continuará.