Monumento al General Máximo Gómez

11 de diciembre de 2017

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Zenaida Iglesias Sánchez

Avenida del Puerto, entre Monserrate y Zulueta

 

 

El Monumento erigido en homenaje a la memoria del insigne General Máximo Gómez (1836-1905), fue obra del escultor Aldo Gamba, quien realizó en bronce la estatua ecuestre. Fue este el proyecto ganador en el concurso convocado como parte del plan de embellecimiento de la zona del litoral. La obra respondía a las ordenanzas estipuladas para tales fines, que exigían por ejemplo, que el representado debía mirar al mar si era extranjero y a tierra si se trataba de un prócer cubano.

Durante la época republicana, fue usual la recurrencia a patrones europeizantes en las obras escultóricas del período, justificada en muchos casos por la formación de artistas cubanos en Italia, la admiración por la cultura clásica y la posibilidad que brindaba la explotación marmórea de Carrara. La obra ejecutada por Aldo Gamba en este monumento, no sólo se insertó en esta línea de referencia, sino que también daba continuidad a la tradición de conmemorar, rememorar y exaltar algún símbolo, o sencillamente embellecer.

 

 

Soporta la escultura un templete rectangular de doce columnas, alegoría del templo de la patria, que descansa a su vez sobre un zócalo de mármol blanco con bajorrelieves laterales. La fuente, de granito color siena, la compone un arco de medio punto del que sale una partida de caballos con tres figuras femeninas, cuya unidad confunde los cuerpos en un solo grupo escultórico. Una pequeña escalera de mármol sirve de acceso al monumento. Los caballos, a manera de surtidores, vierten el agua en una taza circular.

 

 

El conjunto escultórico quedó develado el 18 de noviembre de 1935. Gozó desde entonces de una posición privilegiada, en la Avenida del Puerto entre Monserrate y Zulueta, que permitía apreciarlo desde varios y distantes puntos de la ciudad. En la década del cincuenta, con la realización de las obras del túnel de la bahía, quedaba eliminado el parque que lo rodeaba originalmente. En la actualidad, conserva esta imagen, un poco comprimida y de difícil acceso por la presencia de las vías que confluyen en este punto, pero no por ello disminuye la hermosura de la impresionante obra.