A veces, hay armas que defienden la paz
8 de mayo de 2017
|
Lamentablemente, tiene justificación cuando se trata del imperialismo, y así lo ha ido demostrando la República Popular Democrática de Corea (RPDC) desde su fundación en 1949.
Hoy la tensión crece dramáticamente en la península, y solo el arma nuclear, estimo, ha servido de disuasión para evitar un ataque directo estadounidense.
En medio de ello la República Popular China propuso que se reanudaran las conversaciones para lograr la distensión, comprometiendoa la RPDC a congelar el programa bélico, a cambio de la suspensión de los ejercicios militares que Estados Unidos y sus aliados realizan constantemente en las cercanías de las costas norcoreanas.
Como siempre, los planes hegemónicos estadounidenses, el mantener en constante asedio y asechanza no solo a la RPDC, sino también a China y Rusia, el espíritu revanchista de sus halcones, que no aceptan haber fracasado en la guerra de Corea (1950-1953), han hecho que todos los esfuerzos para llevar la paz a la península hayan sido inútiles.
Así, continúan el estado de guerra con la RPDC y no aceptan firmar un tratado para eliminarlo, se niegan a conversar directamente con los líderes norcoreanos, interfieren cualquier intento de diálogo reunificador entre las dos partes de la península y fueron el factor fundamental para romper las conversaciones hexapartitas de paz, auspiciadas por China, en la que participaban también el Norte y el Sur de Corea, Rusia y Japón.
Desde su creación, en 1949, Corea Democrática ha sido víctima de una propaganda imperialista para distorsionar su imagen, ubicándola en un eje del mal que debe ser destruido por el bien de la humanidad,
Los medios de comunicación occidentales crearon un monstruo que es insensible ante los padecimientos de sus infelices habitantes, todo con el ánimo de justificar el acantonamiento militar norteamericano en el sur y una escalada bélica en los alrededores de Norcorea, con continuados ejercicios militares conjuntos y el reciente emplazamiento de ultramodernos misiles THAAD, que extienden la amenaza a China
Pero a pesar de que EE.UU. ha logrado que Naciones Unidas castigue sucesivamente a la RPDC cada vez que realiza lanzamientos de misiles, que Pyongyang alega como legítima defensa, medios occidentales de prensa nada amistosos con el Norte -AP, Reuters, El Mundo, El País, entre otros- admitieron la inutilidad de las sanciones y el contante crecimiento de la nación norteña.
Y es que la República Popular Democrática de Corea se encuentra en una situación totalmente distinta de las graves dificultades que le acarrearon el bloqueo económico imperialista de Estados Unidos y la Unión Europea, junto a los desastres naturales a fines de la década de los 90 y principios de la del 2000, desde que se emitiera la directiva sobre el objetivo de la construcción de una potencia socialista prospera, habiéndose superado el período especial que atravesó el país.
Los datos económicos muestran avances en todos los campos, sin abandonarse las políticas de autosuficiencia e industrialización, sino que, al contrario, se han reforzado, contrariando las versiones sobre un supuesto “aperturismo” hacia la economía de mercado con que se ilusionaban los exegetas del liberalismo, una vez que falleciera Kim Jong-Il en diciembre del 2011 y asumiera como líder su hijo, Kim Jong-un.
Lo interesante al respecto es que Pyongyang no ofrece generalmente estadísticas oficiales, por lo cual provienen de entes conocidos por su seriedad y objetividad, como la Oficina Nacional surcoreana de Estadísticas, el Instituto de Investigación del Grupo Hyundai (principal empresa gestora del parque industrial intercoreano de Kaesong), The CIA World Factbook (EE.UU.) y la Aduana de la República Popular China.
Aunque haya que tomarlas con prudencia, permiten tener un panorama de la recuperación económica de la RPDC, tras las épocas de racionamiento de alimentos y apagones.
Como datos interesantes, se puede acotar el crecimiento promedio del PIB en un 10% desde el 2012, el volumen del comercio en 11,72%, el sector dela producción energética en 80,56%, agrícola 7,2%, de la construcción 20,10% ydel tejido industrial 5,3%. Además, se redujo en 11,3% el déficit de la balanza comercial.
Hay un dicho coreano que versa así: “Aunque el perro ladre, el tren de la Revolución avanza”. Nuevos complejos de viviendas se están construyendo en todo el país, así como las obras públicas para renovar la industria y garantizar el pleno abastecimiento de todos los bienes y servicios a la población, la cual, admiten órganos de prensa occidentales, sigue apoyando mayoritariamente la senda colectivista, sin clases, adoptada desde su fundación por la RPDC.
Por eso el Imperio la quiere destruir y, lamentablemente, se hace necesario que a veces, hay armas que defienden la paz.
Comentarios