Responsabilidad social y alianzas para el desarrollo

11 de noviembre de 2016

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María Victoria Pardo Miranda

 

 

El V Taller de Manejo y Gestión Comunitaria del Barrio del Santo Ángel reveló la importancia de establecer una cultura de responsabilidad social y de generar alianzas para acciones conjuntas entre los diferentes actores del entorno, declaró Maidolys Iglesias, socióloga del Plan Maestro de la Oficina del Historiador de la Ciudad.

Los más de 60 asistentes al encuentro celebrado recientemente en el Bar Cabaña extendieron un homenaje al Dr. Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad y artífice de la obra de rehabilitación integral en el Centro Histórico, de la cual forma parte el proyecto comunitario Artecorte.

En un primer momento, los expertos Rafael Betancourt y Ovidio D’Ángelo extendieron miradas a la economía social y solidaria desde diferentes perspectivas, mientras que Camilo Condis, colaborador de Artecorte, actualizó acerca de ese proyecto que, bajo el liderazgo de Gilberto Valladares (Papito), conecta las diferentes fuerzas de la zona para la revitalización del Santo Ángel.

Precisamente, el profesor Betancourt citó al barrio como espacio por excelencia, donde la responsabilidad social y solidaria trae consigo mejor competitividad, mayor conservación de los recursos naturales, apoyo de la comunidad y donde se propician los encadenamientos productivos y las sinergias sociales. Por su parte el también catedrático D’Ángelo defendió la tesis de que los procesos de organización colectiva e incluyente, con variedad de actores, de actividades y de grados de compromiso, producen transformaciones comunitarias e individuales.

Tales conceptos se corresponden con el proyecto de desarrollo integral comunitario Artecorte, que surgió con la creación de una escuela de peluquería para jóvenes vulnerables a partir de recursos de un salón de belleza perteneciente al sector privado y hoy es un ejemplo de transformación barrial con beneficios sociales, culturales, ambientales y económicos. “Ello se ha podido lograr gracias a las alianzas tejidas entre diferentes actores: empresas, universidades, instancias del gobierno, la Oficina del Historiador y la comunidad integrada por artistas, trabajadores por cuenta propia y vecinos”, explicó Condis.

Ángel Aguilera, presidente del Consejo Popular Catedral, donde se inserta Santo Ángel, llamó a cada uno de los presentes a aprovechar los espacios y las potencialidades existentes en función de hacer avanzar al barrio y a jugar un papel activo entre todos los sectores a favor del desarrollo local comunitario.

Mediante técnicas de participación grupal y colectiva, los asistentes socializaron la manera en que cada uno puede apoyar el proyecto en lo adelante para contribuir con su crecimiento. Surgieron compromisos de diversa índole como el incremento de la atención a deambulantes y jóvenes desvinculados socialmente, revitalización de una porción de la calle Cuba empleando proyectos de diseño ambiental, creación de un salón de peluquería para personas discapacitadas y de un gimnasio para el mejoramiento físico de los vecinos, y la inserción del tema gastronómico en el proyecto “Necesitamos de tu sonrisa” que acoge a niños con el Síndrome de Down.