Los encurtidos y fermentados en salmueras son fuentes de salud

27 de mayo de 2016

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Ivette Sedeño Cruz

 

 

Existe actualmente el boom de los fermentados por sus propiedades probióticas y beneficiosas para la salud. Los microorganismos que protegen el alimento y alargan su vida, resultan altamente saludables, ya que reimplantan bacterias beneficiosas (probióticas) en nuestro intestino y restauran el equilibrio de su flora. Se dice que no hay nada mejor que tomar o comer encurtidos fermentados en salmuera (no pasteurizados) como pepinillos, cebollas, zanahorias, berenjenas, pimientos o coliflor. También preparar sopas con miso (pasta de soja fermentada) es muy recomendable para controlar el peso y mejorar las defensas.
El ajo se puede fermentar con agua marina, este fermentado en agua marina de origen japonés es el último supernutriente. Se obtiene fermentando en agua de mar el ajo crudo fresco, la cabeza de ajo entera entre 70-90 días. De esta forma, pierde olor característico y su textura se vuelve suave y tierna. Su gusto es comparable al de la mora confitada. Sus propiedades nutricionales son extraordinarias: aporta 18 de los aminoácidos esenciales, mejora la inmunidad del cuerpo, combate la fatiga y el envejecimiento y regula la tensión, el azúcar y el colesterol. Se puede comer solo o con carnes, pescado, pasta, arroces y ensaladas. Además puede usarse para untar en tostadas para canapés.