Catedral Ortodoxa Rusa

19 de febrero de 2016

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Zenaida Iglesias Sánchez

 

Avenida del Puerto entre Sol y Santa Clara

 

 

 

En el año 2008 abrió sus puertas en nuestra ciudad, la Sacra Catedral Ortodoxa Rusa consagrada a Nuestra Señora de Kazán. El templo, que se construyó en una parcela de terreno recuperada para tal fin, fue construido por especialistas de la Oficina del Historiador de la ciudad, en trabajo conjunto con especialistas rusos, lo que permitió llevar a efecto una obra digna de su rango. El arquitecto Jaime Rodríguez tuvo a su cargo el proyecto y el ingeniero Pedro Rodríguez fue el proyectista estructural.

 

 

 

En franco diálogo con el mar, se levanta vistosa atrayendo la mirada del transeúnte por su volumétrica composición, en la que resaltan cinco cúpulas que deslumbran bajo la luz del sol, cuatro de ellas más pequeñas que coronan la nave de la iglesia, con una central de mayor tamaño y el campanario en el extremo izquierdo; dos laminadas en oro, el resto en bronce. Así mismo destaca la escalera que permite acceder al templo, recubierta en granito de la mejor calidad. Se dice que es la segunda por su tamaño entre las construidas en el extranjero, luego de la construida en Israel.

 

 

Los ladrillos fueron cuidadosamente elaborados en la provincia de Sancti-Spíritus y el sistema constructivo abovedado, permitió que fueran colocados sin usar cabillas, cemento, ni madera en encofrados, para esto, los especialistas principales de la obra viajaron a Rusia y observaron muy de cerca las particularidades de este tipo de construcciones. En su espacio, se incluyen la morada del Arcipreste; el salón de reuniones; la Pila Bautismal y un área técnica; la Basílica; la Diócesis con un bloque habitacional; el mirador, la cocina, biblioteca, baños públicos y una tienda de artículos religiosos.

Resalta en su interior el hermoso iconostasio, elaborado expresamente para la catedral habanera por artífices del Complejo Monástico de la Santísima Trinidad y San Sergio, de Rusia. El templo cuenta con suficiente capacidad para acoger a un gran número de fieles.

 

 

Nuestra Señora de Kazán, la patrona de millones de hogares rusos, tiene ahora el suyo en la ciudad antigua, con las puertas abiertas para los devotos y visitantes, que se asoman curiosos y deslumbrados ante la monumental obra ejecutada en 32 meses, cuya primera piedra fue colocada a finales del 2004. Para muchos constituye hoy “un pedazo de Rusia en La Habana”, fiel exponente de la libertad de culto existente en la isla.