Daniel Taboada: Premio Nacional de Patrimonio por la Obra de Toda la Vida

22 de diciembre de 2015

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Yoel Lugones Vázquez

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Cuba, Cultura, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

 

El Consejo Nacional de Patrimonio Cultural anunció oficialmente en la mañana de este martes 22 de diciembre, en la Casa de Don Francisco de Arango y Parreño, en La Habana Vieja, el Premio que otorga a personalidades y arquitectos por la obra de la vida. En este 2015 recayó en el Doctor Daniel Taboada, en atención a su relevante y sostenida contribución en la conservación y rescate del patrimonio arquitectónico de nuestra nación.
Con la presencia del Historiador de la Ciudad de La Habana, Doctor Eusebio Leal Spengler, y Gladys Collazo, Presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, se realizó este anuncio que reconoce la fructífera y extensa labor de Taboada – actualmente Presidente de la Cátedra de Arquitectura Vernácula “Gonzalo de Cárdenas” de la Oficina del Historiador de La Habana –, en la preservación y salvaguarda de nuestra identidad reflejada también en nuestra arquitectura.

 

 

 

Un jurado integrado por el propio Historiador de la Ciudad, la Doctora María Dolores Ortiz y el arquitecto José Linares – en quien recayó este premio en el 2014 – acordó otorgar este reconocimiento a Taboada “por su brillante e integral trayectoria profesional como arquitecto, profesor y formador de arquitectos y restauradores, por su amplia labor de divulgación en publicaciones diversas en Cuba y en otros países, y como permanente defensor del patrimonio cultural de la nación cubana en diferentes foros nacionales e internacionales”.
Más de seis décadas de trabajo en la Dirección de Patrimonio Cultural y en el Centro Nacional de Conservación, Restauración y Museología (CENCREM) desde su creación, avalan la trayectoria de este profesional. Su impronta no solo se ha centrado en nuestra capital, sino también se ha irradiado a otras provincias del país como Matanzas y Cienfuegos. Por solo mencionar lugares que han contado con su estudio e intervención están el Teatro Sauto, el Fuerte El Morrillo, el Castillo de Jagua y el Mausoleo a los Mártires del 5 de Septiembre. En La Habana ha participado en la rehabilitación de importantes inmuebles patrimoniales de los siglos XVII al XIX – la Casa del Conde Barreto, la de los Condes de la Reunión, el Palacio Aldama y los conventos de San Francisco de Asís y el Convento de Santa Clara, por solo citar algunos.
“Este Premio tiene una historia muy comprometida, muy importante – expresó Taboada en declaraciones exclusivas a nuestra emisora – porque lo han recibido muchas personalidades ya; entre ellas, el Doctor Leal, el arquitecto Mario Coyula – mi amigo personal –, Pepe Linares y ahora me tocó a mí. Yo quisiera estar a la altura de esos precedentes. Tengo algunos años y eso me ha permitido trabajar, y hasta ahora hacer lo que me gusta. Desde el año 1964, que empecé por pura casualidad, estoy en esta profesión y no me iría. Ya la arquitectura para mí es el patrimonio; no es solamente la arquitectura contemporánea, no es la del futuro; es la arquitectura del pasado porque creo que ella nos puede hacer creadores para una mejor arquitectura del futuro”.

 

Como versa en el acta del jurado, el Dr. Taboada es miembro de ICOMOS, del cual es Presidente de Honor; por su activa participación en esa organización, ha integrado la representación de Cuba en diversas Asambleas Generales. Es miembro del CICOP Cuba (Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio), de la Comisión Nacional de Monumentos y de la Comisión Provincial de La Habana, miembro de UNAICC y de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) y de la Comisión de Carrera, del Consejo Científico y del Comité Académico del Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana.
Que estudien profundamente la arquitectura de los siglos XVIII y XIX, sin desdorar la de principios del siglo XX que “para nosotros, para mi generación, fue una arquitectura que rehusamos”, es el mensaje que transmite este especialista a las jóvenes generaciones. “En ese tiempo se hizo buena arquitectura, lo que hay es que saber distinguir. Todavía hoy estamos disfrutando de esa arquitectura. Ojalá la nuestra durara tanto, la que hacemos hoy día”, sentenció.
Daniel Taboada – quien recibirá oficialmente el Premio Nacional de Patrimonio en febrero del 2016, durante la celebración de las próximas Jornadas de Arquitectura Vernácula – posee la Distinción por la Cultura Nacional (1983), el Diploma y Medalla Fernando Ortiz, otorgados por la Academia de Ciencias en 1987 por su contribución al desarrollo de la Ciencia y la Técnica en Cuba. Además, ha recibido premios de la UNAICC (Premio Nacional de Arquitectura 1998), el Premio de la Ciudad de La Habana y el Premio Anual de Investigación del Ministerio de Cultura, el Premio de Rehabilitación categoría Proyecto, por la restauración del Teatro Martí en 2002, y otros diplomas y medallas, como la de Honor al Mérito de la “Universidad Jorge Tadeo Lozano” de Cartagena de Indias en 1994 y de la Federación Panamericana de Asociaciones de Arquitectos, primer premio Arquitecto en la Actividad Pública y del CICOP en 2005. En el año 2007 se le otorga el Grado Científico de Doctor en Ciencias Técnicas.