La Habana tiene su Son
17 de octubre de 2014
|Como una pequeña joya artística de la música popular bailable de todos los tiempos, puede ser considerado este disco por los amantes del arte musical cubano.
El que lo adquiera, se apropiara de lo más representativo del Son cubano en todas sus variantes y estilos, interpretado por una agrupación musical que ostenta el patronímico de Ignacio Piñeiro, sin dudas, uno de los más importantes creadores en la historia de la música cubana.
Al cumplirse 85 años de una intensa e inagotable labor, desplegada por este septeto, en el arte de hacer música cubana, a mi juicio, éste pasa al selecto joyero que atesora con celo lo mejor de nuestra cultura musical y patrimonio de su historia.
La Habana tiene su Son, nuevo título que el experimentado sello Bis Music -bajo la eficaz dirección de la Lic. Ela Ramos- pone en nuestras manos lo que compone un fonograma de excelencia y contribuye, sin duda, al indiscutible encadenamiento de gemas sonoras que en verdad, concierta su amplio y rico catálogo.
Querido y admirado por los grandes públicos, no solo de Cuba sino de varios continentes, resulta imposible omitirlo o reducirlo en la concepción de los estudiosos e historiadores de todos los tiempos. Porque este formato vocal-instrumental figura en objeto de reconocimiento público por cronistas y musicólogos cubanos y de muchos otros países.
La Habana tiene su Son –reiteramos- regalo inestimable que nos hace el sello Bis Music, resulta claro ejemplo de que el tiempo jamás desecha, en el catálogo del Nacional de Ignacio Piñeiro, la obra de otros compositores.
Este soporte dinamita esquemas mal concebidos por años por críticos inconsecuentes. Al mismo tiempo, reabre diseños de ejecuciones vocales-instrumentales de un amplio espectro y raigal esencia cubana.
Tampoco descarta un velado sentido concertante, acogiendo formas organizativas a manera de espectáculo que encierra una estrecha vinculación entre público y arte musical.
Con una ligera mirada desde la musicología, La Habana tiene su Son, disco que hoy nos convoca, preserva la sonoridad y timbrica histórica del Septeto Ignacio Piñeiro, para revelar una singularidad rítmico-melódica de alto vuelo conceptual, excelente arsenal polirritmico y politimbrico y una especial interpretación de un conjunto de músicas envueltas en un amplio y admirable empaque estético.
Este soporte sonoro de prestancias, se mueve en un diapasón genérico que va desde el son propiamente dicho, al son-rumba, cruzando por el chachachá, el montuno, el bolero, el afro-son, el bolero-son, la guaracha y la guajira-son, para devenir amplio caleidoscopio de transparentes gamas musicales.
Con invitados de lujo como en el caso de la voz canora del sonero puertorriqueño Andy Montañés; o el pianista Orlando Pérez; o Ernesto Gatelli, cantante del Conjunto Folk Timbalaye; pasando por Gonzalo Moret, indudablemente La Habana tiene su Son desata una variable metrorritmia, variaciones vocales y sistematización periódica y estilística, desarrollada en un tempo vivaz.
La selección de obras que configura este sorprendente fonograma, que hoy el sello Bis Music presenta, reúne un conjunto de temas de loable factura y mejor empaque, amén de representativo de lo más raigal del amplio espectro popular.
La escucha de cualquiera de sus tracks, inspira al disfrute de un universo pletórico por una gran felicidad y depurada estilística nacional.
Mención aparte para el Productor musical Frank ¨El matador¨ Oropeza; el Asistente Lázaro Tamayo; con la gracia de las enjundiosas notas del Dr. Ricardo Oropeza que, a mi juicio, enriquecen una hermosa portadilla; y un DVD que recoge uno de sus célebres conciertos en el extranjero. ¿Qué más puede pedir el exigente escucha?
En hora buena pues esta Habana que ya, indudablemente, tiene su son….
Galería de Imágenes
Comentarios