Balance del verano literario 2013
4 de septiembre de 2013
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La ocasión es propicia, con el inicio del noveno mes del actual año 2013, para pasar breve revista a las acciones que, entre julio y agosto, tuvieron al libro y la literatura como protagonistas de esa gran fiesta del verano que, por estas fechas, se extiende por las catorce provincias del país y el municipio especial Isla de la Juventud.
Las Lecturas de verano 2013 se inauguraban, el 5 de julio, en la capital, con La noche de los libros que, en el emblemático Paseo del Prado, desde la Fuente de la India hasta el Malecón, convertían a la populosa avenida en el centro de atención de los interesados en tan antiguo vehículo de conocimiento y entretenimiento.
Presentaciones de nuevas obras publicadas por sellos nacionales y territoriales, encuentros con autores, lecturas de cuentos y poemas y otras acciones que vinculaban al libro con otras manifestaciones artísticas, formaron parte de la jornada que se extendía a toda la isla.
Verso amigo, novedosa experiencia
Sin temor a la exageración, puede afirmarse que la más novedosa propuesta del programa de estas Lecturas de verano fue la gira nacional Verso amigo que, entre el 17 y el 30 de agosto, recorrió doce provincias de la isla, en homenaje a los aniversarios 160 del natalicio de José Martí y 150 de Julián del Casal.
Auspiciado por el Instituto Cubano del Libro y los Centros Provinciales del Libro y la Literatura, más de medio centenar de poetas y una veintena de trovadores tomaron parte en este recorrido, quienes ofrecieron recitales de poesía y trova, en plazas públicas y centros culturales de cada territorio.
El periplo sirvió, además, para poner a disposición de los lectores títulos recientes de sellos editoriales nacionales y territoriales, entre ellos el cancionero Quiero una canción. Jóvenes trovadores cubanos, con selección de Manuel Leandro Ibarra (Ediciones La Luz) y los poemarios Un loto blanco de pistilos de oro, de Julián del Casal (Editorial Letras Cubanas), y Una mujer escribe, de Carilda Oliver Labra (Ediciones Matanzas).
Verso amigo, esta gira nacional que por vez primera visitó la isla de oriente a occidente, demostró una verdad incontrovertible: la solidez y riqueza del discurso lírico cubano de entre siglos, en que coexisten creadores de diversas generaciones, exponentes de diferentes estilos, tendencias y escuelas.
Otra vez Al calor de los libros
En el Centro Histórico de la capital cubana, la Librería Fayad Jamís organizaba, por segunda vez, la Jornada Al calor de los libros que, entre el 20 y el 28 de agosto, celebraba, con varias propuestas de interés, el tercer aniversario de la inauguración de su nueva sede en la calle Obispo entre Cuba y Aguiar.
El programa incluía el espacio Libro a la carta, con el dramaturgo Nicolás Dorr, quien contaba anécdotas de su labor creadora, ocasión en que se presentaba su libro Teatro insólito 2 (Ediciones Unión) y el actor Leonel Parra presentaba un fragmento de la pieza Diálogos a media tinta.
El libro Ñico Rojas. Obras para guitarra, con transcripción de Martín Pedreira, publicado por Ediciones Museo de la Música, y la actuación de los guitarristas Alejandro Acosta y Yalit González con piezas de tan relevante figura de la música cubana, también era presentado como parte de los festejos de la institución cultural.
En el conversatorio Leer la danza, Perla Rodríguez, primera bailarina de danza moderna de Cuba, rememoró pasajes de su vida artística y se presentaron los libros Diálogos con la danza, de Alicia Alonso, y Mirta Plá. Una joya de la cultura cubana, de Giselle Deyá (Editorial Letras Cubanas), y Más que una nota al pie, de Lorna Burshall (Ediciones Unión).
El cierre de esta jornada fue la inauguración, como parte del Proyecto Pinteratura, de la exposición El “otro” Moro, en homenaje a Fayad Jamís, con quince obras de Sissi Uría Domínguez, Lisandro Hechevarría Lugo, Juliette Cruz Páez y Daniel Mosqueda Reinoso, y curaduría de Jorge Arnaldo Fernández Blanco, basadas en poemas del autor de Por esta libertad.
Al calor de los libros vino a confirmar que la Librería Fayad Jamís es algo más que un centro dedicado a la comercialización de las más recientes novedades editoriales del país. Es, también, un activo centro cultural para acercar al lector a enriquecedoras propuestas centradas en el libro y la literatura.
Más de libros y autores
En la Calle de Madera de la Plaza de Armas, en el corazón de la otrora villa de San Cristóbal de La Habana, continuó, en julio y agosto, el tradicional espacio Sábado del Libro, que posibilitó el encuentro de los lectores con los últimos títulos aparecidos por editoriales nacionales y territoriales.
Una nueva edición del testimonio El juicio del Moncada, de Marta Rojas (Editorial de Ciencias Sociales), era presentada en ocasión del aniversario 60 de las heroicas acciones del 26 de julio de 1953, encabezadas por Fidel y los jóvenes de la Generación del Centenario.
Otros de los títulos que ocuparon el espacio del Sábado del Libro fueron la autobiografía El inmenso mar, de Langston Hughes (Editorial José Martí); la tragedia Romeo y Julieta, de William Shakespeare (Editorial Arte y Literatura), y el ensayo Ecos distantes, voces cercanas, miradas feministas, de Norma Vasallo (Editorial de la Mujer).
En la Biblioteca Provincial Rubén Martínez Villena, también en la Plaza de Armas, el Instituto Cubano del Libro dedicaba el espacio El Autor y su Obra, concebido para rendir tributo a los escritores y editores de la isla, al investigador y profesor José Altshuler y al poeta Alex Pausides.
En los 13 de Ediciones Territoriales
Por iniciativa del Comandante en Jefe Fidel Castro, hace trece años, se creaban las Ediciones Territoriales, hermoso empeño que ha permitido, en las catorce provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, contar con sellos editoriales dedicados a la publicación, fundamentalmente, de autores de cada territorio.
El pasado 13 de agosto, en ocasión del aniversario 87 del natalicio del líder histórico de la Revolución Cubana, en todo el país se recordaba, con presentaciones de libros y otras iniciativas de cada localidad, estos años consagrados a la promoción de la literatura creada en la nación.
La novela Mayonesa bien brillante. Una novela de amor, de Legna Rodríguez Iglesias (Ediciones Matanzas); la investigación Presidio Modelo: preguntas y respuestas, de Jesús Ortiz Durán (Ediciones El Abra), y el relato para niños La comarca de la abuela Chicha, de Eldys Baratute (Editorial Cauce), eran algunos de los títulos de Ediciones Territoriales puestos a disposición de adultos, niños y jóvenes en este nuevo aniversario.
Un festival para la despedida
El Festival del Libro y la Lectura, el último viernes de agosto, sirvió para despedir el verano literario. En todo el país, las plazas, calles y otros espacios de las capitales provinciales, sirvieron como sede al cierre, por ese año, de un programa encaminado no solo a entretener, sino también a enriquecer la espiritualidad de los seres humanos.
En la antigua villa de San Cristóbal de La Habana, el encuentro ocupó la populosa avenida 23, desde las calles B hasta Infanta, en El Vedado, con variadas y sugerentes propuestas, dirigidas tanto al público adulto como a niños y jóvenes, que integraron el libro a otras propuestas deportivas y artísticas.
El catálogo puesto a disposición de los asistentes a este fin de fiesta incluyó títulos como 100 preguntas sobre José Martí, de Francisca López Civeira (Editorial Gente Nueva); El adversario, de Raúl Antonio Capote (Editorial Letras Cubanas); Cajón de bateo, de Norberto Codina (Ediciones Matanzas), y La Revolución Cubana del 30. Ensayos, de Fernando Martínez Heredia (Editorial de Ciencias Sociales y Ruth Casa Editorial).
Las Lecturas de verano 2013 ya han quedado atrás. Para algunos, el programa organizado dio respuesta a sus expectativas; otros, por el contrario, esperaban mayor diversidad en las propuestas. Todos comprobaron, sin embargo, que el libro es, y seguirá siendo, ese compañero insustituible para disfrutar y aprender en los agobiantes veranos por venir.
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