La importancia de conocer cómo estar bien informado

2 de marzo de 2023

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Diana García García

 

 

No es secreto que los medicamentos son una parte imprescindible de la vida cotidiana del hombre actual. Por ello estar bien informado sobre los medicamentos que se utilizan es muy necesario para cualquier paciente, pero algo muy importante es elegir cuidadosamente las formas en que se tiene acceso a esa información.

Existen diversas formas de acceder a los contenidos relacionados con temas de salud. En las últimas décadas esto se ha visto facilitado por el uso de los medios de comunicación y las nuevas tecnologías. Por lo general estas fuentes de información son una vía bastante asequible para que las personas dispongan de un gran cúmulo de información sobre este y otros muchos temas.

Sin embargo, aunque el uso racional de los medicamentos exige que el paciente esté debidamente informado de todo lo concerniente a su enfermedad y la farmacoterapia que utiliza, no toda la información disponible hoy en día puede satisfacer de manera efectiva sus necesidades. Esto se debe a que cada fuente de información dirige su mensaje a diferentes tipos de público y por esta causa no todas resultan apropiadas para todas las personas.

El mensaje más especializado destinado a los médicos no es útil para el consumidor común, para el cual se preparan mensajes más generales en los que se evita el empleo de terminología médica compleja que pueda generar confusiones o malas interpretaciones.

De ahí que, si bien resulta correcto que el paciente busque el máximo posible de información antes de iniciar el tratamiento que le han indicado, la selección objetiva de las fuentes que utiliza es también una gran responsabilidad.

Algo a tener en cuenta es el hecho que, disponer de información sobre medicamentos no anula la necesidad de acudir al facultativo para el diagnóstico de la enfermedad y la prescripción del tratamiento. Tampoco sustituye el consejo del farmacéutico encargado de dispensar el medicamento en la farmacia.

Estos dos escalones preparan al paciente para cumplir del mejor modo con la farmacoterapia y realizar una administración medicamentosa segura y efectiva. Algo que decididamente repercutirá de manera positiva en su estado de bienestar y salud.