Oswaldo Guayasamín

3 de noviembre de 2022

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Leonardo Depestre Catony

 

 

El pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín fue un amigo de la casa que convivió entre los cubanos, nos visitó una y otra vez, y no se cansó de expresar su solidaridad con los cubanos. Sin embargo, no se hizo fácil encontrar la fecha de su primera estancia en suelo cubano. El dato lo da una revista Opina de hace unos cuantos años, donde el maestro declaraba lo siguiente:

“Yo vine la primera vez a Cuba en 1961. Prácticamente al triunfo de la Revolución. Entonces ya hice un retrato de Fidel (…) La venida mía ya era de otra manera, porque tenía amistad con los miembros de la Embajada de Cuba en Quito, y un equipo de periodistas que venía, me colocaron a mí. Luego, en ese tiempo, volví varias veces: en el 61, 62, 63… En cierta medida he sido testigo de muchos acontecimientos importantes de la primera etapa de la Revolución.”

En Cuba, donde tantas veces se detuvo, estableció su taller y su casa, la casa de Guayasamín, como se conoce, en una antigua mansión del siglo XVIII con el número 124 de la calle de Obrapía, en Habana Vieja, que puede ser visitada por el público.

Recorrer la instalación es palpar la huella viva del maestro Oswaldo Guayasamín, tanto en sus lienzos como en los de otros pintores que allí tienen un espacio donde compartir con el visitante.

Para Guayasamín (que en lengua quichua quiere decir  “ave blanca volando”), pintar significó realizarse artísticamente, interactuar con el mundo. De ahí que su obra resulte tan copiosa, que sobrepase los miles de lienzos.

Se trató de un artista que hizo de la pintura su leitmotiv y que a través de esa pintura expresó sus más entrañables pensamientos y esperanzas en el orden personal y social. Apegado a las raíces amerindias, comprometido en la búsqueda de una sociedad más justa para todos, Oswaldo Guayasamín está presente entre los cubanos. Ello, pese a su desaparición física, el 10 de marzo de 1999, cuando el artista, el amigo y el maestro, contaba 80 años.

Ecuatoriano y universal, Oswaldo Guayasamìn es de los artistas  cuya impronta queda, se renueva y germina pues se trató de un pintor cuya obra pertenece a los pueblos y estos así lo reconocen.