Precauciones con los medicamentos en los viajes
26 de agosto de 2022
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El llevar medicamentos cuando se va de viaje es una situación de la vida cotidiana que demanda estar bien informados sobre lo que se puede y no se puede hacer, o lo que es correcto o incorrecto.
Es bien sabido que los viajes son una actividad de gran interés para la mayoría. Tanto si se viaja por placer o por trabajo, son incontables las personas que se trasladan continuamente de un lugar a otro, por las diferentes vías de transportación que hoy existen. Muchos de los viajeros llevan en sus viajes, ya sea por necesidad o por precaución, los medicamentos que pueden necesitar durante el tiempo que tome la travesía.
Desde antiinflamatorios o antipiréticos hasta medicamentos específicos para una determinada enfermedad o dolencia, son incontables los fármacos que pueden acompañar al viajero, para los que deben crearse las condiciones para que su traslado se realice de forma segura y ordenada.
Antes de subir a un avión o cruzar una frontera con medicamentos, se deben tener en cuenta requisitos tan importantes como llevar el prospecto, mantener el medicamento debidamente etiquetado y en caso de que proceda, acompañarlo de su correspondiente receta médica.
De forma general, para viajar con medicamentos se aconseja llevarlos todos en el equipaje de mano, dentro de sus envases originales y adecuadamente etiquetados, tal como se venden en la farmacia.
La conservación de los medicamentos durante los viajes es otra cuestión importante a considerar. Los preparados farmacéuticos mantenidos en condiciones de temperatura inadecuadas, pueden deteriorarse y comprometer la vida del enfermo. Es por esto que resulta importante atender a la conservación de los medicamentos durante el viaje para evitar que se afecte su calidad.
Tanto los medicamentos que necesitan mayor frío como los que resisten el calor, deben transportarse en un embalaje isotérmico adecuado, ya que es relativamente fácil que se superen temperaturas inadecuadas durante los viajes como sucede con las maletas que se transportan en las bodegas de aviones, como las que se llevan en el interior de los autos cuando son estacionados al sol en verano.
Los medicamentos que requieren conservarse entre 2º y 8° Celsius deben ser transportados en condiciones que respeten la cadena de frío empleando un embalaje isotérmico refrigerado y cuidando de no provocar la congelación del producto.
En el caso de los medicamentos cuyo rotulado aconseja conservar a una temperatura inferior a 25º ó a 30° Celsius, algunos días de exposición a temperaturas superiores a 30° no tendrán efecto sobre su calidad. Sin embargo, no deben quedar expuestos mucho más tiempo a temperaturas elevadas como las que frecuentemente se alcanzan en los maleteros o en el interior de los autos que transitan a pleno sol. Como medida de seguridad se aconseja transportarlos en un embalaje isotérmico no refrigerado.
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