Soportes digitales, fotografía y diseño en la preservación del patrimonio
29 de mayo de 2013
|El desarrollo constante de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación a escala global, facilita los mecanismos de conservación del patrimonio mundial. Ejemplo de ello resulta la digitalización de los fondos de los archivos, donde se atesora una parte valiosa de la historia de cada nación. Este martes 28 de mayo, los participantes en el III Diplomado Internacional “Medios para comunicar el Patrimonio” tuvieron la oportunidad de conocer las ventajas que ofrece este proceso para la preservación de los materiales audiovisuales y sonoros.
En conferencia impartida por el ingeniero, periodista y diseñador Pedro Arturo Pérez Rosabal, miembro de la Comisión de digitalización y salvaguardia del patrimonio sonoro y audiovisual del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), los diplomantes adquirieron mayor conciencia de la necesidad de la conversión al soporte digital de estos bienes ya que permite “su manipulación a través del sistema informático, el acceso inmediato y a distancia, además de la indexación automática”, explicó Pérez Rosabal.
También comentó que esta acción “democratiza el acceso del público general a los fondos, permite crear diferentes versiones de una misma obra y contribuye a mejorar la calidad de la catalogación”. De igual forma, el conferencista se refirió a los inconvenientes de la digitalización en cuanto a “la fragilidad temporal del almacenamiento; a la cada vez más acelerada aparición de nuevos formatos y reproductores; la circulación incontrolada de contenidos y los sistemas complejos de protección de datos”.
En un segundo momento de la jornada matutina, el arquitecto Orlando Inclán –Director del Taller de Urbanismo de la Dirección General de Proyectos de Arquitectura y Urbanismo de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana– disertó sobre el valor de la imagen como un instrumento imprescindible en la conservación del patrimonio.
En ese sentido, se refirió a cómo las fotografías antiguas han permitido reconstruir tanto pequeñas como monumentales obras de la arquitectura. La labor de restauración del Capitolio Nacional, que desarrolla actualmente la Oficina del Historiador de la Ciudad, constituye un ejemplo de la utilización de este soporte.
Durante la conferencia, reconoció también la importancia de comunicar los valores arquitectónicos, la historia de los inmuebles, incluso, el pensamiento que hay detrás de cada uno de ellos, para que la población se apropie de estos espacios. “Si no somos conscientes de cuánto trabajo llevó, por ejemplo, la construcción del alcantarillado de La Habana hace más de 100 años, difícilmente podamos entenderlo, apreciarlo y a raíz de ello cuidarlo, respetarlo y reconocerlo”, aseguró.
En cuanto al enmascaramiento de la cámara de rejas del sifón de La Habana, el nuevo cubo que desde hace unos meses engalana la Avenida del Puerto, expresó: “Es una obra que apuesta más por significar lo que existe debajo de la superficie: una de las maravillas de la ingeniería en nuestro país. Hemos querido hacerle este homenaje con el cubo para que sea un llamado de atención. A la vez, constituye una acción más para, desde la arquitectura, comunicar el patrimonio.
“Cuando las personas se acercan a él pueden conocer a través de pancartas la historia del sistema de alcantarillado de la capital cubana. Este soporte informativo contribuye a que los ciudadanos entiendan su función urbana, social y su repercusión en nuestras vidas diarias”, explicó Inclán.
En su intervención, el también conductor de la revista “Hablando de espacios”, de la emisora Habana Radio, especificó que esta construcción se ha erigido como un ejemplo para la educación ambiental de la población: “Mientras mejores ciudadanos seamos y cuidemos más el medio ambiente, contribuiremos con nuestro actuar a conservar los valores patrimoniales”, puntualizó Inclán.
Luego de una mañana de intenso trabajo, la sesión de la tarde se inició con la proyección del documental “Cristóbal de La Habana”, Tesis de Licenciatura del periodista cubano Yesel Galbán. A través de este producto audiovisual, resultado de una acuciosa investigación, se presentan varias facetas de la vida de Emilio Roig de Leuchsenring, primer Historiador de la Ciudad de La Habana.
La labor de Roig como comunicador del patrimonio, su constante lucha por preservarlo, así como su capacidad para aglutinar a los más destacados intelectuales de su generación en torno a la preservación de la identidad nacional, son aspectos abordados en el material, a partir del testimonio de algunas personas que trabajaron a su lado y de investigadores de su obra.
Al diseño como herramienta para perpetuar el patrimonio y hacerlo llegar de manera atractivo al público, se acercaron los diplomantes durante la conferencia del diseñador gráfico José Nieto, quien ha trabajado en publicaciones como “Las primeras villas de Cuba”, “Solo detalles”, “Un don del cielo. Trinidad de Cuba”, “Rostros en peligro. Especies cubanas amenazadas”, entre otras, que no solo han abordado el espacio arquitectónico, sino también el natural.
Respecto a la importancia de su labor en la difusión de los valores patrimoniales, Nieto comentó a Habana Radio que el diseño constituye uno de los primeros elementos que llama la atención en el momento de consumir un material; por lo tanto tiene que ser atractivo para que cautive e invite a leer el resto. “En el caso del patrimonio, si realizamos un trabajo serio en cuanto a composición y tipografía, contribuimos a que el contenido sea más asequible para el lector”, puntualizó el especialista.
Para la jornada de este miércoles 29 de mayo, el III Diplomado Internacional “Medios para comunicar el Patrimonio” se prevé la conferencia de la arquitecta Patricia Rodríguez, Directora del Plan Maestro, sobre el Modelo de Revitalización Integral de La Habana Vieja. Además, los diplomantes se acercarán al sistema de medios tradicionales y no tradicionales que emplea la Oficina del Historiador para comunicar el patrimonio.
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