La cultura árabe en Cuba rinde homenaje a Eusebio Leal

11 de septiembre de 2021

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Thays Roque Arce

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Casa de los Árabes, Cuba, Cultura, Eusebio Leal Spengler, Oficina del Historiador de La Habana

 

 

El agua como el principio de todo, elemento nutricio y trono de Dios, se expresan en el texto sagrado del Corán. La lluvia es un buen augurio, una oportunidad de sanación, de reinicio; se esfuma lo impuro para dar paso a la vida.

Esta tarde del 10 de septiembre llovió en el Centro Histórico de La Habana lo suficiente para que quedáramos convencidos de que la lluvia no era más que éxito y buena suerte. La Casa de los Árabes de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana acogió un homenaje desde la plástica y la orfebrería, fundamentalmente, al Historiador de la Ciudad, el Doctor Eusebio Leal Spengler, en el aniversario 79 de su natalicio.

 

 

La institución sita en la calle Oficios se funda el 16 de noviembre de 1983 como el primer museo etnográfico del Centro Histórico. “Es la primera casa para explicar una cultura que influyó en la nuestra. Esta fue su obra”, dijo su director, el Doctor Rigoberto Méndez, para asegurar el vínculo inquebrantable entre el Historiador de la Ciudad y el inmueble.

 

 

Eusebio Leal se sintió tan presente en esta cita que era inevitable pensar en su forma de actuar, por ejemplo, ante un suceso como la lluvia inmutable. En sus palabras de inauguración, habría recordado la importancia que concede al agua el Islam. Hubiera narrado alguna embriagante historia para probarlo, quizás aludido a la riqueza cultural de una región deslumbrante, o rememorado el murmullo húmedo de los palacios de al-Andalus. Habríamos olvidado la lluvia persistente con sus palabras, y el cambio de planes que tuvo que enfrentar una velada planificada perfectamente sería intrascendente. Debió estar el Historiador esta tarde con nosotros, de alguna forma, pues pese a los contratiempos fue un encuentro perfecto.

 

“Homenaje Leal” fue una cita con la cultura árabe convocada por Firdaus, la primera marca de corte islámico en Cuba y Latinoamérica. Con un exquisito trabajo en gemas preciosas y semipreciosas, la marca eligió la fecha para el lanzamiento y exposición de su nuevo catálogo titulado “Lealtad”, y dedicado a quien fue un gran admirador de la belleza y el oficio de la orfebrería.

 

 

A la exposición de exquisitos anillos, conjuntos y colgantes, se sumó en diálogo el trabajo de la joven artista de la plástica Stephanie Rivero. Esta villaclareña de 20 años, graduada de la escuela de artes de su provincia, en apenas un mes creó diez piezas de pequeño formato a tintas negras y ocres, donde la imagen del Historiador dialoga con la ciudad, sus símbolos, su Apóstol, el Héroe Nacional José Martí. Tomando como fuente fotografías del Historiador capturadas por el lente de Néstor Martí, Rivero “plasma en sus dibujos al hombre humilde, apasionado que fue nuestro querido Historiador” con un talento admirable.

 

 

La delicadeza y el realismo de las imágenes fueron captados por el Excmo. Sr. Faisal bin Falah Al Harbi, Embajador Extraordinario y Plenipotenciario del Reino de Arabia Saudita, quien asistió a la cita en la misma semana en que presentó sus Cartas Credenciales ante el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

 

 

El máximo representante saudí quedó maravillado con la historia de la Casa de los Árabes del Centro Histórico de La Habana, de la mezquita Abdallah que complementa el discurso del propio museo, y cómo desde ambos se articulan los lazos de hermandad entre su país y el nuestro.

 

“Cuba tiene tres vía de llegada de lo árabe a nuestro país. Primero fue todo lo que vino a través del acervo cultural español: la arquitectura, la cocina, los moriscos que llegaron como una emigración críptica y prohibida, (…) y por supuesto también la influencia del lenguaje castellano que conserva más de 5 mil vocablos de origen árabe. Después está la huella de la emigración, la segunda etapa. La emigración de libaneses, sirios y palestinos a Cuba, conformando una comunidad de decenas de miles de habitantes que se expandieron por toda la Isla (…) Y está la huella de la solidaridad, es decir, la relación de Cuba con los 22 países árabes de una forma u otra”, destacó Rigoberto Méndez en sus palabras de bienvenida.

 

 

El especialista reconoció la ayuda saudita a la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana con un importante crédito de más de 20 millones de dólares para inversión en obras sociales, culturales y de beneficio para la comunidad de La Habana Vieja y su patrimonio. Precisamente gracias a ese generoso apoyo del Reino de Arabia Saudita se inaugurará próximamente la Escuela Técnica Carlos Rafael Rodríguez, única de su tipo en el municipio.

 

 

El intercambio con los representantes de la Dirección de la Oficina del Historiador que asistieron al encuentro, desde todas las áreas de trabajo de la institución, y el goce de reconocer el respeto y el aprecio que de su cultura tienen los cubanos, fue de los elementos que destacó el político de la velada.

 

 

Una delicia ineludible, directamente conectada con el propósito de honrar la memoria del Historiador, fue la degustación de blends de té en honor a Eusebio Leal Spengler y a su madre, Silvia Spengler, preparados por las manos de Kira Romero, cofundadora de Firdaus.

 

 

Gastronomía, danza, música, poesía, moda y decoración, de la mano de emprendimientos y artistas locales, fueron los elementos suficientes para que esta tarde en la Casa de los Árabes se reviviera la función del inmueble como puente entre dos culturas; como memoria viva de su fundador.