Leal, gran gestor cultural

6 de septiembre de 2021

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Yoel Lugones Vázquez

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Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Cultura, Eusebio Leal Spengler, Oficina del Historiador de La Habana

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

Para conmemorar los 79 años del natalicio del Doctor Eusebio Leal Spengler y constatar la gran capacidad y el poder de vislumbrar el futuro que siempre tuvo, se realizó este 6 de septiembre el Andar Leal, Gestor Cultural, un recorrido por diversos espacios que creó y defendió siempre el Historiador de la Ciudad de La Habana, y puestos en función no solo de los pobladores de la parte más antigua de la ciudad, sino de todo aquel interesado en la historia patrimonial y cultural de esta zona.

 

 

“La Oficina del Historiador (OHCH) ha creado una gran familia, entre artistas, especialistas, museólogos, y ha sido justamente la figura de Leal un vértice y un vórtice en el cual hemos girado y aun sentimos esos deseos de tenerlo”. Así comenzó el encuentro Álvaro Verdes, Director de la Casa-Museo Simón Bolívar, quien condujo el recorrido.

“La intención de este Andar es aunar todas esas manifestaciones que hemos visto en las redes sociales donde se ha tocado el Leal coleccionista, el Leal arqueólogo, el Leal historiador. El calificativo de gestor cultural engloba todas esas manifestaciones y les da un carácter evocador de manera singular. Y es que Leal no se limitó solo a la cultura como las expresiones de arte, sino que rompió con ese límite y demostró que la cultura tiene que ser la manifestación de todos los modos de ser y de hacer de los habitantes de La Habana Vieja”, nos explicó Álvaro.

 

 

Justo en la Calle de Madera, frente al Museo de la Ciudad – lugar emblemático donde radicó su Oficina durante muchos años –, comenzó esta cita que nos demostró que Leal “comenzó con el patrimonio edificado hasta llegar al espíritu de la gente”.

En un primer momento se recordó a su feliz predecesor, el creador de la Oficina del Historiador, Doctor Emilio Roig de Leuchsenring y la relación que se fue creando entre maestro y discípulo, cómo fue bebiendo Leal de esa savia y cómo fue aplicando sus enseñanzas en el día a día.

 

 

El pintor Ángel Ramírez agradeció, de parte de todos los artistas, esa deferencia que siempre tuvo Leal por la creación, por el arte. Es por eso que a muchos cedió un espacio para que tuvieran su galería-taller, pero sobre todo para que los transeúntes pudieran pasear y disfrutar de una buena muestra, de creaciones que alimentaran el espíritu. “No hay otra palabra mejor que Gracias para nuestro entrañable amigo Leal”, afirmó Ramírez.

 

 

Momento especial fue para conocer la labor ininterrumpida del equipo de trabajo que hace posible el Programa Cultural de la Oficina del Historiador de la Ciudad. Un programa cultural que tiene, desde la Dirección de Gestión Cultural, una concepción muy bien pensada de todo aquello que se quiere, como propuesta artística literaria, mostrar desde el Centro Histórico de La Habana. Para Katia Cárdenas, su Directora, el programa cultural es precisamente que la oferta que se encuentra en esta parte de la ciudad exhibe una exquisitez, un compromiso con lo mejor de la vanguardia artística literaria; son propuestas que muchas veces no se pueden encontrar en otro sitios de la ciudad y del país por esa exclusividad que confiere el hecho de que sucedan los proyectos culturales dentro de un enclave como este, que sin dudas ha permitido un gran desarrollo.

 

 

Posteriormente fue visitado el Museo Casa de los Árabes con su actual mezquita, lugares que siempre defendió Leal para que cada cultura estuviera presente en el Centro Histórico habanero. Con el objetivo principal de divulgar los valores árabes desde sus costumbres, tradiciones, arte, arquitectura y estudiar la presencia árabe en Cuba a partir del periodo de la colonización española, surgió este espacio, al decir de Rigoberto Menéndez, Director de la institución. El Museo fue inaugurado el 16 de noviembre de 1983 como parte del proyecto de restauración integral rectorado por la Oficina del Historiador de la Ciudad en el Centro Histórico de La Habana. Al decir de Menéndez, fue el primer museo etnográfico fundado por la OHCH y único de su tipo en Cuba y en América Latina. Muchas de sus piezas fueron donadas por personalidades del mundo árabe islámico, por diplomáticos de Cuba, y por el comandante Fidel Castro.

 

 

 

La amistad entre Oswaldo Guayasamín y el Doctor Eusebio Leal Spengler fructificó también en un espacio insigne de la zona más antigua de la capital cubana: la Casa que lleva el nombre del Pintor de Iberoamérica. Guayasamín gustaba de la arquitectura capitalina, de su patrimonio, sus tradiciones y de esa magia inexplicable que se respira entre adoquines y calles antiguas. En el afán de retratar el alma de La Habana a través de su gente, pintó también a Leal, con el estilo indiscutible de su arte y su genialidad para lograr el color, los claroscuros y el empaste perfecto. En este espacio también se gesta culturalmente múltiples iniciativas para comprobar que la los pueblos ecuatoriano y cubano están muy cerca espiritualmente.

 

 

En el afán de Leal de que cada raíz latinoamericana tuviera su presencia en La Habana Vieja también surgió la Casa del Benemérito de las Américas Benito Juárez, más conocida como la Casa de México, creada desde 1988, el más importante centro promotor de la cultura mexicana en Cuba. Miguel Hernández, Director, nos hablo que aquí se exponen conocidos y nuevos valores de la plástica y del arte popular, además de haber espacios habituales destinados a la promoción de disímiles manifestaciones artísticas. La biblioteca Alfonso Reyes acumula una excelente colección bibliográfica con más de siete mil textos. Asimismo, La Casa Benito Juárez conserva una muestra de artesanía mexicana en sus diferentes manifestaciones, técnicas y materiales, que evocan al mundo mesoamericano y las distintas influencias culturales.

 

 

Uno de los últimos espacios visitados fue la recién inaugurada Casa Leal, en la otrora casa Arango y Parreño, situada en la céntrica calle de Amargura donde radicó el despacho del Historiador de la Ciudad de La Habana. Aquí se proyectó la creación de este espacio, una institución que pretende convertirse en referencia nacional del pensamiento y oratoria de Leal, al tiempo que permitirá al público acceder a la institución con una nueva confección museológica. La Casa Eusebio Leal Spengler es una feliz iniciativa que ha tenido la OHCH para mantener vivo el espíritu, las enseñanzas y el pensamiento de nuestro eterno Historiador.